Julian Assange está más cerca de ser ser juzgado en Estados Unidos, después de que dos jueces del Tribunal de Apelación de Londres hayan dado luz verde a su extradición este viernes. La sentencia será recurrida "tan pronto como sea posible", ha anunciado el equipo de Assange, si bien lo más probable es que el caso vuelva a ser examinado por un juez de distrito. En ese nuevo proceso se deberán evaluar las garantías diplomáticas americanas sobre el trato que recibiría el fundador de WikiLeaks si es condenado en aquel país, garantías que el Tribunal de Apelación ha estimado al parecer suficientes. La justicia de Estados Unidos quiere juzgarle por 18 delitos de espionaje e intrusión informática, unos cargos que pueden acarrearle una condena de hasta 175 años.

Salud mental

El pasado mes de enero Vanessa Baraitser, una jueza de distrito en la capital británica, rechazó la demanda de extradición de Assange por considerar que su salud mental era demasiado frágil y corría el riesgo de suicidarse. Los abogados que representan al gobierno americano apelaron el pasado mes de octubre la sentencia que ahora ha quedado anulada. En la vista celebrada en octubre argumentaron que la magistrada había dado excesiva importancia al informe del experto, el psiquiatra Michael Kopelman, sobre el estado mental de Assange y había restado importancia a los testimonios de otros expertos.

El gobierno de Washington quiere juzgar al fundador de WikiLeaks por la difusión a partir del 2010 de más de 700.000 documentos diplomáticos y militares secretos relacionados con actividades de Estados Unidos en los conflictos de Afganistán e Irak. El australiano de 50 años se arriesga a ser condenado a una pena de hasta 175 años de cárcel. Estados Unidos le acusa de obtener ilegalmente información clasificada y desea juzgarle por la Ley de Espionaje y la Ley de Abuso y Fraude Informático.  

Assange fue detenido por la policía británica en abril del 2019 después de haber pasado siete años refugiado en la embajada de Ecuador en Londres, donde se recluyó cuando se hallaba en libertad bajo fianza. En aquel momento temía ser extraditado a Estados Unidos desde Suecia, el país que le reclamaba entonces por unas denuncias de violación que finalmente fueron abandonadas.