El ministro de Exteriores británico, Dominic Raab, ha anunciado que partirá este miércoles de viaje hacia la "región" en torno a Afganistán para tratar de facilitar la salida de británicos y colaboradores locales que siguen intentando huir del país.

Ante un comité parlamentario que analizó su gestión de la crisis, el jefe de la diplomacia británica rehusó ofrecer más detalles sobre esa visita: "Somos siempre muy cuidadosos a la hora de indicar movimientos de viaje debido a las implicaciones de seguridad", apuntó Raab.

Con todo, el ministro desveló aparentemente parte de sus planes al responder al diputado conservador Tom Tugendhat, que le preguntó si esta será su "primera visita a Pakistán". "He estado antes en Pakistán, pero no como ministro de Exteriores", dijo Raab.

El representante especial del Gobierno británico sobre la transición afgana, Simon Grass, ha viajado ya a Catar para mantener contactos con representantes de los talibanes e intentar asegurar corredores para la salida de más personas de Afganistán.

El ministro afirmó que el Gobierno no conoce la cifra exacta de británicos que han quedado atrapados en el país tras la salida de sus tropas y señaló que su estimación es que hay todavía unos "pocos cientos".

"Sesgo de optimismo"

Cuestionado por la precipitación con la que se han visto obligados a abandonar Kabul los soldados occidentales, Raab reveló que los servicios de inteligencia civiles y militares del Reino Unido trabajaban con la perspectiva de que era "poco probable" que los talibanes tomaran la ciudad durante este año.

El ministro admitió que las suposiciones con las que trabajaban eran "claramente erróneas" y achacó en parte esos fallos a un "sesgo de optimismo" sobre el papel que iba a desempeñar Estados Unidos y el comportamiento de los talibanes.

La oposición laborista inquirió al ministro sobre una serie de documentos con información sobre colaboradores afganos que los funcionarios de la embajada británica dejaron abandonados en su huida, según reveló el diario "The Times".

"Teníamos un plazo de cinco días para cerrar la embajada y se acortó debido a la situación sobre el terreno. Aún así, he pedido una revisión completa sobre lo que ocurrió para asegurarnos de que podemos aprender lecciones", afirmó Raab a ese respecto.

El titular de Exteriores aseguró que todas las personas que habían trabajado para el Reino Unido y que aparecían en esos documentos, entregados al Ejecutivo por "The Times", fueron rescatadas y están en el Reino Unido.

El Ministerio de Interior confirmó hoy por su parte que los afganos que colaboraron con la misión británica en Afganistán y que han sido rescatados tendrán derecho de residencia "indefinido" en el Reino Unido, en lugar de un permiso temporal de cinco años previsto hasta ahora.

Según Interior, durante este año se prevé que 5.000 antiguos colaboradores afganos y sus familias se asienten en el Reino Unido.