El expresidente estadounidense Donald Trump ha cargado contra el actual mandatario, Joe Biden, por la retirada de Afganistán tras la toma de Kabul por los talibán y la ha definido como "la mayor humillación en política exterior de la historia de Estados Unidos".

"Esta quedará como una de las grandes derrotas militares de todos los tiempos y no tenía por qué haber sido así", ha afirmado Trump este sábado durante un acto político ante miles de simpatizantes en Cullman, Alabama. "Esta no ha sido una retirada, sino una rendición absoluta y sin motivo alguno", ha argumentado.

Con esta retirada, Biden ha mostrado "debilidad en la Casa Blanca" hasta el punto de que "Vietnam parece una clase magistral de estrategia en comparación con la catástrofe de Joe Biden". "Ha rendido nuestra base aérea, ha rendido nuestras armas, ha rendido nuestra Embajada", ha apuntado, según recoge la prensa estadounidense.

Trump ha recordado los miles de millones de dólares que costaron las armas y el material que ha quedado abandonado, en manos de los talibán, tales como 600.000 fusiles de asalto, unos 2.000 vehículos blindados y 40 aeronaves como helicópteros Black Hawk.

"No tenía por qué ser así. Todo lo que tenía que hacer (Biden) era mantener a las tropas hasta que hubiera salido todo: nuestros ciudadanos, las armas,... y después bombardeas las bases y dices 'bye, bye'", ha argumentado.

Trump ha reconocido que tras 20 años de conflicto su gobierno estaba preparando la salida de Afganistán, pero una salida "digna". "Pronto será el 11 de septiembre y vamos a tener la bandera talibán ondeando en la Embajada por culpa de Biden", ha afirmado.

Igualmente se ha referido a las negociaciones de su Gobierno con los talibán, a los que ha destacado como "grandes negociadores" y "duros combatientes". "Conmigo al cargo los talibán jamás hubieran soñado siquiera con capturar nuestra base o con desfilar con armas estadounidenses", ha subrayado.

Tony Blair achaca la retirada a "imbéciles eslóganes políticos"

Por otro lado, El exprimer ministro británico Tony Blair ha achacado la retirada de las fuerzas internacionales de Afganistán a la obediencia a "imbéciles eslóganes políticos" en una decisión que podría relegar a Estados Unidos, como país abanderado de la salida del país centroasiático, y a Reino Unido a la "segunda división de las potencias internacionales".

El exprimer ministro británico Tony Blair. EP

"No necesitábamos hacerlo. Elegimos hacerlo. Lo hicimos obedeciendo a un imbécil eslogan político sobre 'el fin de las guerras interminables', como si nuestro compromiso en 2021 fuera remotamente comparable a nuestro compromiso hace 20 o incluso diez años", ha escrito Blair en un texto publicado en la página de su fundación Instituto para el Cambio Global.

Blair, quien fue primer ministro durante los ataques terroristas del 11 de septiembre y la posterior invasión de Afganistán junto con Estados Unidos en 2001, reconoció que se habían cometido errores "graves" en los últimos 20 años. No obstante, ha avisado de que "el mundo ahora no está seguro de dónde se encuentra Occidente, dado la obviedad de que la retirada de Afganistán no obedece a una gran estrategia, sino a la política".

"Cualquiera que haya recibido una promesa por parte de los líderes occidentales la considerará como una moneda débil, con todo merecimiento", ha apuntado Blair. "Irán, China y Rusia se van a dar cuenta de ello", ha añadido.

Blair ha avisado de que Estados Unidos corre el peligro de ver reducida su influencia internacional, arrastrando consigo a Reino Unido. "La ausencia de consenso y la profunda politización de la política exterior están atrofiando visiblemente el poder de Estados Unidos", ha explicado el ex primer ministro, "y Reino Unido ha recibido poca o ninguna consulta del que se trata de su mayor aliado".

"No lo vemos todavía. Pero corremos el riesgo de ser relegados a la segunda división de potencias mundiales. Quizás no nos importe. Pero al menos deberíamos tomar la decisión de forma deliberada", ha indicado.

Blair también ha avisado contra la imposición de "plazos arbitrarios" para la evacuación de los afganos que ayudaron a las fuerzas aliadas. "Tenemos la obligación moral de seguir haciéndolo hasta que se evacue a todos los que necesitan serlo", ha escrito.

Por último, el ex primer ministro ha pedido un nuevo "grupo de contacto" entre el grupo del G7 para pedir cuentas al nuevo régimen afgano. El grupo debería trabajar junto a la OTAN y Europa en una lista de "incentivos, sanciones y acciones", destinadas a mantener bajo control los abusos de los talibán.

"Esto es urgente", ha indicado Blair, "porque el desorden de las últimas semanas debe ser reemplazado por algo parecido a la coherencia y con un plan que sea creíble y realista".