Facebook está "promoviendo de forma activa" la negación del Holocausto en su plataforma. Esta es la conclusión a la que han llegado los investigadores el centro de estudios Institute for Strategic Dialogue (ISD), que se dedica al combate del extremismo. Denuncia que un algoritmo de Facebook permite que, al buscar información al respecto, dirija a los usuarios a otras páginas similares.

En total, encontraron 36 páginas relacionadas con el negacionismo y 366.068 personas conectadas de forma activa. Entre ellas, páginas que sugerían literatura vinculada o dedicadas al gran negacionista británico, el historiador David Irving. Trece de estas páginas estaban dedicadas a las teorías de la conspiración, nueve eran ideológicamente de extrema derecha, siete antisionistas, cinco pro-Palestina, una de derecha cristiana y una islamista.

Jacob Davey, director de la investigación, explica que "la decisión de Facebook de permitir que el contenido de negación del Holocausto permanezca en su plataforma se enmarca en el pretexto de proteger el debate histórico legítimo, pero pasa por alto la razón por la que las personas se involucran en la negación del Holocausto". Y prosigue: "La negación del Holocausto es una herramienta deliberada que se utiliza para deslegitimar el sufrimiento del pueblo judío y perpetuar el tradicional ejército antisemita y cuando la gente hace esto, debe ser visto como un acto de odio".

También en otras redes

Los investigadores cuentan que este tipo de contenidos también proliferan en otras redes sociales como Reddit, Twitter y YouTube. Pero que, mientras en estas redes han tratado de erradicarlos, Facebook se ha negado a bloquearlos. De hecho, el fundador de Facebook, Mark Zuckerberg, reconoció en julio del 2018 que no tenía ninguna intención de hacer nada al respecto. “Soy judío, sé que hay mucha gente que lo niega, algo que me parece profundamente ofensivo, pero no creo que tengamos que bloquearlo porque creo que hay cosas que piensan algunas personas que simplemente están mal”. O sea, que lo permite por una cuestión de libertad de expresión.

La gran mayoría de los historiadores coinciden en que 11 millones de personas fueron exterminadas por el Estado alemán nazi y sus colaboradores entre 1933 y 1945. Los judíos fueron los que tuvieron más víctimas: hasta seis millones fueron asesinados en fusilamientos masivos, masacres y campos de concentración. Recientemente Facebook anunció que prohibía las teorías de conspiración sobre que los judíos controlan el mundo, pero no ha querido clasificar la negación del Holocausto como una forma de discurso de odio, una postura calificada por el ISD como "ceguera conceptual".

"Lograr el equilibrio adecuado entre mantener a las personas seguras y permitir la libertad de expresión es difícil y sabemos que muchas personas están en total desacuerdo con nuestra posición", dijo un portavoz de Facebook en medios británicos. Y agregó: "Estamos constantemente desarrollando y revisando nuestras políticas y consultando con organizaciones de todo el mundo para asegurarnos de que lo estamos haciendo bien".

Discurso de odio

Pero, según el informe de ISD, la negación del Holocausto no debería tratarse "como un simple debate sobre hechos". "Esta percepción ignora el hecho de que la negación del Holocausto es una forma de discurso de odio antisemita, así como una forma de desinformación", sostiene el informe.

No se trata de una acusación nueva. En el 2009, Brian Cuban, el hermano del multimillonario inversor estadounidense Mark Cuban, ya criticó a Facebook por esta misma razón, por "animar y promover el odio". La plataforma se limitó a responder: "La mera declaración de que el Holocausto no existió no es una violación de nuestras reglas".

Tras las declaraciones de Zuckerberg en el 2018, Jonathan Greenblatt, director ejecutivo de la Liga Antidifamación, organización judía que tiene como objetivo evitar el antisemitismo, dijo que la negación del Holocausto "es una táctica de engaño intencionada, deliberada y antigua de los antisemitas que es indiscutiblemente odiosa, hiriente y amenazante para los judíos".

Contenidos prohibidos

En varios países donde la negación del Holocausto es ilegal, como Alemania, Francia y Polonia, Facebook prohíbe ese contenido. El informe ha coincidido con la publicación de un comunicado de líderes religiosos y activistas británicos pidiendo al Gobierno de Boris Johnson que presente urgentemente una nueva legislación sobre "daños 'on line'". Exigen que se responsabilice a las empresas de medios sociales de lo que se dice en ellos. En el comunicado se cita el escándalo por los comentarios antisemitas que el rapero Wiley hizo en Twitter. Tras una investigación, cerró la cuenta del músico.

El comunicado dice que "estos comentarios muestran la prevalencia del odio" y acusa al Gobierno de no haber cumplido su promesa de presentar una legislación que proteja a los usuarios. En respuesta, un portavoz del Ministerio del Interior dijo: "Introduciremos nuevas leyes para proteger a los usuarios de las redes sociales de una amplia gama de daños, incluidos los delitos de odio".