Corea del Sur ha anunciado este martes que el curso escolar se iniciará el próximo 9 de abril tras cinco semanas de retraso debido al coronavirus, pero que las clases se realizarán a través de internet y no de manera presencial para así evitar que repunte el contagio.

El primer ministro, Chung Sye-kyun, que es quien encabeza la unidad de respuesta nacional al coronavirus, ha anunciado hoy la medida y también ha admitido que no todos los colegios podrán arrancar las clases a la vez dado que la instalación e implementación de los sistemas de clases a distancia se harán de forma progresiva. Aunque Corea del Sur es uno de los países con mejores redes de telecomunicaciones del mundo existen dudas sobre cómo soportará la infraestructura un despliegue de este tipo a nivel nacional.

De hecho, las universidades surcoreanas, que iniciaron el curso también de manera 'on-line' el pasado 16 de marzo, vienen sufriendo diversos problemas técnicos para mantener a tanta gente conectada simultáneamente a las clases. Existe también preocupación sobre la posibilidad de garantizar los recursos tecnológicos necesarios para asistir 'on-line' a todas las familias con menor capacidad económica del país.

Tres veces retrasada la vuelta

Pese a que estaba previsto que el curso escolar se iniciara el pasado 2 de marzo, las autoridades surcoreanas han retrasado tres veces el arranque debido a la propagación del coronavirus que alcanzó en el país su pico a final de febrero. Corea del Sur, que no ha limitado la movilidad de sus ciudadanos y mantiene abiertas las fronteras, ha logrado desde entonces estabilizar y limitar el número de nuevos contagios gracias a un sistema de testeo masivo y seguimiento exhaustivo de las rutas de infección.

El país ha informado hoy 125 nuevas infecciones detectadas el lunes, y lleva más de 20 días identificando menos de 200 contagios al día. La mayoría de casos detectados el lunes, 62, correspondieron al gran foco de Daegu (sureste), donde se han visto nuevos brotes en hospitales y centros geriátricos.

La región en torno a Seúl, donde vive la mitad de la población, tuvo 43 casos, muchos ligados a gente retornada que se contagió fuera y a nuevos brotes en iglesias. A su vez, otros 15 contagios se identificaron en aeropuertos.

En total, Corea del Sur suma 9.786 infecciones -de las cuales 4.216 son casos activos- y 162 muertes (la tasa de letalidad del virus en el país es del 1,65 %), mientras que hay ya 5.408 curados, el 55,2 % de todos los que se infectaron.