En muchos países, la interrupción voluntaria del embarazo sigue siendo el caballo de batalla del movimiento feminista y uno de los principales reclamos del activismo por los derechos humanos, con una legislación que varía mucho alrededor del globo.

Malta, estado confesional donde la fe católica es la religión oficial, sigue siendo el único país de la Unión Europea que prohíbe por completo el aborto, con penas de entre 18 meses a tres años de prisión. El aborto también es ilegal en Andorra y San Marino, países europeos no miembros de la UE.

En el resto del mundo, la interrupción voluntaria del embarazo está prohibido en unos quince países: Congo, Egipto, Gabón, Guinea-Bissau, Madagascar, Mauritania, República Democrática del Congo y Senegal en África; Filipinasy Laos en Asia; y Honduras, Nicaragua, El Salvador, Surinám, Haití y República Dominicana en América.

En El Salvador, donde el aborto es castigado con duras penas de prisión, casos como el de Teodora Vásquez han causado una fuerte conmoción: la salvadoreña pasó once años entre rejas por un aborto natural por el que la justicia le acusó de homicidio y la sentenció a 30 años de cárcel.

ACCESO RESTRINGIDO

En otros lugares, el aborto está sujeto a condiciones extremadamente restrictivas. En países como Costa de Marfil, Libia, Uganda, Sudán del Sur, Irak, Líbano, Siria, Afganistán, Yemen, Bangladés, Birmania, Sri Lanka, Guatemala, Paraguay y Venezuela el aborto es accesible solo en caso de peligro para la vida de la madre. En Corea del Sur el Tribunal Supremo examina una apelación contra la ley de 1953, que solo permite el aborto en caso de violación, incesto o amenaza a la salud de la madre.

En el 2017, Chile puso fin a una prohibición total del aborto de casi 30 años, ahora autorizado bajo tres preceptos específicos: peligro para la vida de la madre, violación y no viabilidad del feto. En Brasil, donde la interrupción del embarazo se permite bajo esos tres mismos casos, un proyecto de ley amenaza con restringir aún más esas excepciones.

DERECHO BAJO PRESIONES

Son las mujeres de Europa y América del Norte las que se benefician de la legislación más liberal, aunque con algunas excepciones notables. Por ejemplo, a diferencia del resto de Reino Unido, el aborto es ilegal en Irlanda del Norte incluso en caso de violación, incesto o malformación grave del feto, penado con cadena perpetua. Está permitido solo si el embarazo amenaza la vida de la madre.

Otro país de la Unión Europea con leyes muy restrictivas es Polonia, que permite el aborto solo en caso de violación, incesto, peligro para la vida de la madre o malformación fetal irreversible. A principios de este año, no obstante, un intento de los ultraconservadores de limitar aún más el acceso al aborto provocó una ola de protestas significativas en todo el país.

En otros países occidentales, los opositores al aborto continuan moviliazados, como en Estados Unidos, donde el aborto se despenalizó en 1973, pero el debate enre los 'pro-vida' y los defensores del derecho a decidir de la mujer sigue vivo y la legislación varia entre los diferentes estados.