Ignacio Echeverría falleció en el ataque terrorista de Londres. Así lo confirmó ayer su hermana en su cuenta de Facebook, donde señaló que «Ignacio no sobrevivió al momento del atentado. Gracias a todos los que le quisisteis y cuidasteis. Sabemos que no somos los únicos tristes».

Fuentes diplomáticas españolas informaron de que hoy la policía mostrará el cadáver a la familia de Ignacio. «Queremos ver y estar con el cuerpo de Ignacio. Parece que hasta el viernes como pronto no podemos estar con su cuerpo», había lamentado horas antes la joven, que por el contrario quiso agradecer al personal de la embajada española «su ayuda».

Echeverría desapareció el pasado sábado momentos después del atentado y no se había vuelto a saber nada de él hasta la media tarde de ayer, cuando su familia conoció la triste noticia. Fue visto por última vez momentos después del atentado, tendido en el suelo después de haber sido atacado por uno de los terroristas, a los que plantó cara con un monopatín para defender a una mujer.

«En ese momento se tiró de la bicicleta y golpeó al agresor con un monopatín mientras otros dos le agredían por detrás y se quedó tendido en el suelo», relató la familia. El español iba sin documentación y su hermana, que también reside en Londres, se pasó por varios hospitales para hallarle sin resultados hasta que ayer el Gobierno español le notificó la muerte. «Fue un valiente, se enzarzó para salvar a la mujer», añadió la familia.

Un ejemplo de solidaridad

La clase política y la Casa Real han reconocido el heroísmo de Echeverría, hasta el punto de que el alcalde de Las Rozas (Madrid), José de la Uz, ha asegurado que propondrá conceder su nombre a un espacio público de la localidad que tendrá una pista de skate. Además, se le otorgará la Medalla de Honor del municipio madrileño.

El Gobierno español, por su parte, emitió un comunicado minutos tras conocerse la noticia asegurando que el de Ignacio fue un comportamiento «ejemplar». «La actitud ejemplar de Ignacio Echevarría durante los atentados es, para todos, un modelo de solidaridad. Su valor al defender a una persona indefensa sirve para recordar la necesidad de permanecer unidos frente a la lacra del terrorismo», rezaba la nota.

El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, tachó de «inhumano» y de «desesperante» que el Reino Unido no hubiera dado hasta ayer ninguna información sobre el español, del mismo modo que el ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, aseguró estar «perplejo» por la falta de información poco antes de tener conocimiento de la noticia.

«Terrible trance»

El Gobierno español expresó en el comunicado su deseo de transmitir a los familiares y amigos del fallecido que «no están solos en su dolor y que España está con ellos compartiendo su desolación y acompañándoles en este terrible trance».

El Reino Unido ha demostrado tener un protocolo lento a la hora de confirmar las identidades de los fallecidos en ataques terroristas. En un primer momento, el Ejecutivo británico pidió a la hermana del fallecido las huellas dactilares de Ignacio, y casi de forma paralela empezó a realizarse una prueba de ADN. La obligatoriedad de ambas pruebas supone un lapso de tiempo considerable, sobre todo si se tiene en cuenta que hasta que la prueba de ADN no se ha completado queda prohibido confirmar a la familia el fallecimiento de manera oficial.

Además, otro de los requisitos del protocolo que retrasa la identificación de las víctimas es la prohibición de que los familiares puedan entrar en la morgue para confirmar visualmente la identidad del fallecido hasta que las pruebas de ADN den sus resultados. En el caso de Ignacio, a pesar de que sus padres viajaron a Londres para poder reconocer a su hijo entre las ocho víctimas, las autoridades británicas insistieron en que el protocolo no permite que ningún familiar acceda a la morgue.

La otra hermana del fallecido, Isabel Echeverría, dedicó unas emotivas palabras a Ignacio en su cuenta de Facebook, en las que elogió su actitud. «Mi hermano Ignacio intentó parar a unos terroristas, y perdió su vida intentando salvar a otros. Igna, te queremos y no te olvidaremos», escribió Isabel.

Del mismo modo, Isabel quiso agradecer al consulado, la embajada, los ministerios, al presidente y a todo el Gobierno español, la policía, HSBC, Iberia y los conocidos de Ignacio la ayuda recibida tras la desaparición.