1 Sin cárcel para los guerrilleros 2 Las FARC repararán a las víctimas 3 Sin escaños por el momento

No habrá cárcel para los guerrilleros que confiesen delitos de sangre y colaboren plenamente. El Tribunal para la Paz debe fijar los espacios

en donde deben estar los sancionados. Solo podrán moverse en áreas que no serán superiores a la de las zonas acordadas para la desmovilización. Para Human Rights Watch (HRW) este texto define mejor qué tipo de castigo recibirán los miembros de las FARC y cómo se restringirá su libertad. La ONU verificará el cumplimiento. En cuanto a las responsabilidades militares en la violación de derechos humanos, se presumen castigos equivalentes a los contemplados para la insurgencia.

Las FARC se comprometen a reparar a las víctimas con el capital económico acumulado a lo largo de los años del conflicto. El misterio sobre el capital acumulado se desvelará en el proceso de abandono de las armas, cuando la guerrilla colombiana deberá presentar un inventario de bienes y activos para destinarlos al fin especificado. Algunas fuentes le estiman a la guerrilla colombiana una fortuna cercana a los 10.000 millones de euros. En el marco de los acuerdos, las FARC se han comprometido a declarar su riqueza. Además, deberán proporcionar a las autoridades colombianas aquellas informaciones sobre narcotráfico de que dispongan.

Una vez convertida en agrupación política y reinsertada en la vida civil

colombiana, la ya exguerrila de las FARC no podrá inscribir candidatos para que ocupen los 16 escaños transitorios que contempla el nuevo acuerdo de paz. Estos escaños les corresponderán a las comunidades y víctimas afectadas por el conflicto. En las elecciones del 2018 y del 2022 se les garantizarán no obstante cinco escaños en ambas cámaras del Congreso, además de los que pudieran obtener por los votos. El partido político naciente no tendrá beneficios excepcionales de financiación: estará en igualdad de condiciones con las demás fuerzas políticas tradicionales.