Turquía sí ha consumido combustible producido en territorios controlados por el Estado Islámico (EI), pero no en la actualidad. O al menos no en cantidades significativas. Las acusaciones efectuadas por Rusia a este respecto han colocado a Ankara bajo la lupa, pero varios especialistas coinciden en que, si bien el contrabando continúa a través de la porosa frontera turco-siria, el volumen es risible.

"Hubo un periodo, durante el verano del 2014, cuando hubo un pico. Sobre todo era gasolina entrando a Turquía, alrededor de 50.000 barriles al día producidos en refinerías controladas por el Estado Islámico", afirma a este diario Valerie Marcel, experta en petróleo de Oriente Próximo.

"No sabemos bien durante cuánto tiempo, pero era una cantidad importante. Era cuando el EI tenía refinerías en Irak y refinerías móviles. Y como Turquía vende la gasolina más cara que los países vecinos, siempre ha habido contrabando de gasolina (hacia Turquía). Así que se usaron redes ya existentes (para el nuevo tráfico de combustible producido por los yihadistas)", explica.

En aquel momento, según Marcel, la noticia de este fenómeno "forzó al Gobierno turco a llevar a cabo una redada contra los contrabandistas y arrestaron a unos cuantos". Eran simples traficantes. No eran gente de compañías petrolíferas o de la familia del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, como señaló Rusia.

El primero en desmentir la compra de petróleo del EI, al menos desde Irak, por parte de Turquía es el Gobierno Regional del Kurdistán iraquí (KRG). Con sus tropas combatiendo contra los yihadistas, el KRG considera imposible que caravanas petroleras del EI atraviesen su territorio hacia Turquía. "El KRG exporta su petróleo con oleoductos y camiones cisterna hacia Turquía para venderlo en todo el mundo", relata el jefe de la Comisión de Energía del KRG, Serko Cevdet.

Gareth Jenkins, del Instituto de Asia Central y el Cáucaso, asegura que "el petróleo pasaba habitualmente por tantos intermediarios antes de cruzar la frontera que incluso los contrabandistas no saben muy a menudo si procede de zonas controladas por el EI o no". Los sobornos en los pasos fronterizos entre Turquía y Siria son habituales. "Hay contrabando de personas y de manufacturas para la logística del EI", agrega Marcel.