NUEVO INTENTO DE ACUERDO

Berlín y Viena piden una cumbre extraordinaria

Los ministros de Interior de la UE volverán a reunirseel próximo martes

SILVIA MARTINEZ

Alemania y Austria solicitaron ayer al presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, la celebración de una cumbre extraordinaria de la UE la semana próxima tras el fiasco de la reunión de ministros de Interior del lunes, que demostró la incapacidad de consensuar la distribución de 120.000 refugiados entre los 28 estados miembros.

La cancillera alemana, Angela Merkel, apeló a la necesidad de recuperar "el espíritu europeo" para la búsqueda de soluciones ante un desafío como la acogida de los refugiados, al tiempo que evitaba hablar de sanciones a los países reticentes al reparto de los contingentes propuestos por la Comisión Europea, ya que "las amenazas no son el camino adecuado para la unidad", dijo.

Merkel matizaba así unas declaraciones realizadas por su ministro de Interior, Thomas de Mazière, que sugirió la posibilidad de adoptar "medidas de presión" contra los países que no fueran solidarios, como la retirada de las ayudas estructurales.

En una rueda de prensa en Berlín tras un encuentro con su homólogo austriaco Werner Faymann, Merkel subrayó la necesidad de que los líderes europeos, al margen de las cuotas a debate, aborden cuestiones como la ayuda a los países de origen de los refugiados y la creación de más centros para el registro de los solicitantes de asilo en las fronteras exteriores de la UE.

La cancillera defendió la decisión de Alemania de restablecer los controles fronterizos para "mejorar" el registro de los solicitantes de asilo que llegan al país y por razones de seguridad, una semana después de haber abierto sus fronteras de forma "excepcional" por motivos humanitarios. Merkel y Faymann convocaron su reunión ante la "situación de emergencia creada" en las fronteras de ambos países y después del fiasco de la reunión del pasado lunes.

DECISION DE TUSK A la espera de que Tusk decida mañana si convoca la cumbre reclamada por Berlín y Viena, la presidencia luxemburguesa de la UE acabó por convocar para el próximo martes otro consejo de ministros de Interior extraordinario. La presidencia expresó su deseo de aprobar en ella una decisión final sobre el mecanismo provisional para reubicar a los 120.000 refugiados.

Mientras, en la Eurocámara, el alto comisionado de la ONU para los refugiados, António Guterres, criticó la inacción y el retraso de la UE en afrontar una "emergencia absoluta". Guterres alertó ante la llegada del invierno: "Si no damos una ayuda masiva, la entrada del frío será terrible y el problema será aún más difícil de solucionar".

Tracking Pixel Contents