El Gobierno chino confió hoy en que la renovación de la alianza militar entre Estados Unidos y Japón no afecte a los intereses del gigante asiático, y en concreto a sus reclamaciones sobre las islas Diaoyu/Senkaku, disputadas por Pekín y Tokio.

"Estados Unidos y Japón tienen la responsabilidad de asegurar que esta alianza no perjudicará los intereses de terceras partes, incluyendo China", señaló en rueda de prensa un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Hong Lei, al ser preguntado por la renovación del tratado bilateral entre Washington y Tokio.

El portavoz chino también hizo referencia a la disputa territorial en el Mar de China Oriental por las islas Diaoyu (Senkaku en japonés), cuya soberanía reivindican China y Japón.

"Las islas Diaoyu son un territorio inherente de China y no importa lo que la gente diga o haga, no cambia el hecho de que pertenecen a China", dijo Hong.

Estados Unidos y Japón definieron el lunes en Nueva York los nuevos parámetros de su cooperación en materia de defensa, en la primera revisión que se hace desde 1997, que considera las nuevas amenazas y que extiende el ámbito geográfico de la alianza militar.

El secretario de Defensa de Estados Unidos, Ashton Carter, negó que esta revisión del tratado bilateral esté orientado específicamente hacia China. "Hay otros temas tanto en esa región del mundo como globales", agregó, y mencionó las amenazas nucleares de Corea del Norte.

Los compromisos adoptados detallan los planes para el despliegue de naves y tropas de Estados Unidos en la región de Asia-Pacífico, así como de sistemas de defensa y aviones de vigilancia, además de la cooperación en materia logística.