Tras la manifestación gigante del pasado 13 de enero contra las bodas gais, que se convirtió en la primera gran protesta social contra François Hollande, ayer salieron a la calle los partidarios de la llamada ley del "matrimonio para todos". Dos días antes de que el Parlamento francés inicie el debate del texto, la movilización de los defensores de que las parejas del mismo sexo tengan los mismos derechos que las heterosexuales reunió a miles de personas --400.000 según la organización y 125.000 según la policía-- en París.

La manifestación está lejos de las cifras de los opositores a la ley --800.000 según la organización y 340.000 según la policía-- pero cumplió con su objetivo de demostrar que el Gobierno no está solo. "Queremos que quede claro que no representan a todos", resumió, en alusión a la Francia conservadora que clama contra la reforma, el veterano empresario Pierre Bergé, que fue la pareja de Yves Saint Laurent durante 30 años.