El Tribunal Especial para Sierra Leona (TESL), trasladado a La Haya desde Freetown, ha condenado este miércoles al expresidente de Liberia Charles Taylor a 50 años de cárcel por crímenes de guerra y contra la humanidad cometidos durante la guerra civil que asoló el país africano entre 1991 y el 2001 y que causó 120.000 muertos.

Los jueces consideraron en especial, a la hora de imponer la pena, el "tremendo sufrimiento" de las víctimas, y rechazaron los factores atenuantes propuestos por la Defensa como la edad, la salud y las circunstancias familiares de Taylor.

"El tribunal os condena unanimemente a una pena única de 50 años de cárcel. El acusado es responsable de haber ayudado, alentado y planificado algunos de los crímenes más odiosos de la historia de la humanidad", afirmó el juez samoano Richard Lussick, al anunciar la sentencia en una audiencia pública en Leidschendam, en las afueras de La Haya.

Taylor, de 64 años, cumplirá su pena en Gran Bretaña en virtud de un acuerdo con el TESL. La Fiscalía había pedido una pena de 80 años de cárcel, que la Defensa consideró "desproporcionada y excesiva".

Arresto en el 2006

Presidente de Liberia entre 1997 y el 2003, Taylor fue arrestado en el 2006 en Nigeria y el pasado 26 de abril el TESL le declaró culpable de 11 cargos de crímenes de guerra y contra la humanidad, incluido asesinato, violación y saqueos, cometidos entre 1996 y el 2002.

Taylor es el primer exjefe de Estado condenado por la justicia internacional desde el proceso de Nuremberg tras la segunda guerra mundial. El otro exjefe de Estado juzgado en un tribunal internacional, el expresidente serbio Slobodan Milosevic, no llegó a recibir sentencia porque murió cuando el juicio no había terminado.

Aunque el TESL tiene oficialmente su sede en Freetown, el juicio de Taylor, que comenzó el 4 de junio del 2007, se trasladó a Holanda por razones de seguridad.