Las autoridades de Toulouse han decidido rearmar a los policías municipales, en el marco de la alerta escarlata --el máximo nivel en la escala de amenazas terroristas-- que se emitió el lunes en la región para localizar al responsable del asesinato de un profesor y tres niños de un colegio judío. El sospechoso es un motorista que tras cometer el tiroteo huyó. La policía sigue la pista de tres exmilitares neonazis. El ministro francés de Interior, Claude Guéant, que coordina la investigación, ha declarado este martes que todavía no han identificado al agresor pero ha revelado que según un testigo, este llevava una "pequeña cámara alrededor del cuello".

El presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, confirmó en una comparecencia en el Elíseo que las informaciones que le han transmitido las autoridades judiciales y policiales permiten afirmar que "una misma persona y una misma arma" mataron a tres militares la semana pasada (uno en Toulouse y dos en Montauban; todos ellos pertenecientes al 17º regimiento de paracaidistas de Montauban) y a las cuatro personas del Liceo Ozar Hatorah. Las autoridades consideran "evidente" que se trata de crímenes racistas, dado que los fallecidos son de origen judío, magrebí y antillano, en el caso de los soldados.

Un hombre bajo, musculoso y con tatuajes

Según el diario francés Le Point, la policía trabaja sobre la pista de tres exmilitares neonazis que pertenecían al citado regimiento de paracaidistas hasta que en fueron expulsados en el 2008 después de que la prensa francesa publicara una fotos de los tres haciendo el saludo nazi delante de una cruz gamada. Los tres tendrían, según Le Point, un perfil similar al que los investigadores tienen del agresor; un hombre musculoso y con tatuajes. El diario explica que dos de ellos han cambiado de vida y están localizados --uno se ha reenganchado en otra unidad del Ejército francés y el otro trabaja en un restaurante-- mientras que un tercero, presentado como el "líder", ha desaparecido.

Al parecer, según publica este martes Le Monde citando a fuentes policiales, una cámara de videovigilancia habría filmado al autor del crimen de la escuela. Las imágenes están siendo ahora analizadas por los investigadores. Algunos testigos han apuntado que el sospechoso tenía un tatuaje y una cicatriz en la mejilla izquierda. Otros lo han descrito como un hombre bajo y vestido todo de negro.

Motocicleta robada

La motocicleta que empleó el asesino de la escuela judía, una scooter tipo T-Max de la marca Yamaha, era robada y fue la misma que el autor del crimen utilizó para matar la semana pasada a los tres militares. Según informó France Info, el vehículo fue robado a principios de marzo en Toulouse, días antes del primer ataque, perpetrado el 11 de marzo en esa misma ciudad del sur de Francia, contra un soldado paracaidista.

La policía pudo localizar a su propietario gracias a que las cámaras del colegio ante cuya puerta tuvo lugar el tiroteo filmaron la matrícula de la moto utilizada por el asesino, añadió la emisora. Agregó que su propietario, que la había comprado en mayo pasado, pudo demostrar a la policía sin dificultad alguna que había sido víctima de un robo.

Mientras sigue la investigación, Toulouse está de duelo. Esta mañana, las escuelas de la ciudad guardará un minuto de silencio por las víctimas. Los cuerpos de los cuatro fallecidos --el profesor Jonathan Sandler, sus hijos Gabriel y Arieh, de 4 y 5 años, y la pequeña Myriam Monsonego, de 7, serán repatriados este martes a Israel, según ha anunciado el portavoz de la comunidad judía en Francia, Joël Mergui.