Un hombre ha abierto fuego esta mañana, a las 7.55 horas ante una escuela judía de Toulouse (sur de Francia) causando cuatro muertos, tres de ellos niños, y cuatro heridos, dos graves. Las víctimas se encontraban ante el Liceo Ozer Hatorah, en el barrio Croix-Daurade, que también es punto de encuentro para el transporte escolar de los alumnos de la escuela primaria, también israelí, Gan Rachi. El Ministerio del Interior ha ordenado reforzar la seguridad en todas las escuelas judías de Francia. El adulto fallecido es un profesor de 30 años. Sus hijas de 3 y 6 años también están entre las víctimas mortales. La cuarta fallecida es la hija del director de la escuela, de 10 años, que ha muerto ante los ojos de su padre. Entre los heridos graves hay un estudiante de 17 años que está siento intervenido de urgencia a vida o muerte.
El agresor, que no tiraba al azar sino que apuntaba a la cabeza de las víctimas, ha disparado desde una moto negra y se ha dado a la fuga. Según la policía, el motorista ha actuado de forma muy premeditada disparando a pocos metros de las víctimas
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Según fuentes policiales, el calibre de las armas utilizadas por el agresor --11, 43 y 9 milímetros-- coincide con el utilizado la semana pasada también por un motorista que mató a tres militares, uno en Toulouse y dos en Montauban, a 60 kilómetros de esta ciudad. Los militares atacados, que recibieron tiros en la cabeza cuando no estaban de servicio, pertenecen a unidades de paracaidistas de élite que sirven en Afganistán, por lo que no se descarta que se trate de un crimen terrorista.
El tiroteo de esta mañana ha conmocionado a Francia. El ministro de Interior, Claude Gueant, ha evocado similitudes con los tiroteos contra los militares. Tanto Gueant como el embajador de Israel en Francia han viajado a Toulouse para solidarizarse con las víctimas, como también han hecho el presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, y el líder socialista y candidato al Elíseo François Hollande.
