Una misión de alto nivel del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) ha llegado este domingo a Irán para inspeccionar las instalaciones nucleares del país y discutir con el régimen de Mahmud Ahmadineyad el controvertido programa nuclear de la república islámica.

El equipo de seis expertos encabezado por Herman Nackaerts ha llegado a primera hora al aeropuerto de Teherán. Durante su estancia, de tres días, visitarán las principales instalaciones atómicas del país y abordarán con las autoridades iranís los detalles de su proyecto nuclear. "Esperamos que Irán se involucre con nosotros en nuestras preocupaciones respecto a la posible dimensión militar del programa (nuclear)", declaró Naeckerts, el director adjunto del OIEA para salvaguardas (controles), en Viena, antes de viajar hacia Irán.

Naeckerts aseguró que el organismo está impaciente por retomar el diálogo con Teherán. "Estamos tratando de seguir las resoluciones de la Junta (de Gobernadores del OIEA) e intentando resolver todos los asuntos pendientes", añadió.

Bomba atómica o usos pacíficos

Gran parte de la comunidad internacional, con EEUU e Israel a la cabeza, acusan al régimen iraní de ocultar, bajo su programa civil otro de naturaleza clandestina y carácter militar, cuyo objetivo sería producir bombas nucleares. Teherán insiste en que sus esfuerzos en el campo nuclear tienen como único objetivo el uso pacífico de la energía y tecnología atómica.

La visita se produce en medio de una renovada tensión entre Teherán y la Unión Europea por el anunciado embargo contra la importación de petróleo iraní, una medida que busca privar al régimen de fondos para financiar sus investigaciones nucleares. Irán ha advertido a la UE que su embargo supondrá que el precio del barril de petróleo pase de los 120 dólares actuales a los 150.