El Gobierno egipcio ha presentado este lunes la dimisión ante el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas, en el poder desde la salida del presidente Hosni Mubarak en febrero, según ha anunciado el portavoz del Ejecutivo, Mohamed Hijazi, citado por la agencia oficial de noticias MENA. Hijazi ha asegurado que la renuncia se ha adoptado "en vista de las difíciles circunstancias que el país está atravesando".

La Junta Militar llamó a última hora de la noche del lunes a todas las fuerzas políticas a "un diálogo urgente" para conocer los motivos de la crisis actual y salir de ella, aunque sin alusiones a si acepta o no la dimisión del Gobierno de Egipto. Según dijo Efe un portavoz de uno de los partidos presentes en el Gobierno, que pidió no ser identificado, la cúpula castrense sí ha aceptado ya la renuncia del ejecutivo en pleno, si bien todavía no hay confirmación oficial. La misma fuente dijo que la Junta Militar ha pedido a los ministros seguir en sus puestos hasta que se designe el nuevo Gobierno.

El ministro egipcio de Información, Osama Heikal, ha asegurado que el Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas no aceptaba la dimisión del Gobierno, y agregó que el Ejecutivo seguirá ejerciendo sus funciones hasta que la Junta Militar decida al respecto.

"La dimisión se presentó porque la mayoría de los ministros vieron que se estaban enfrentando a grandes presiones que les impedían llevar a cabo sus funciones, así que no podían seguir con ellas", dijo Heikal a la agencia oficial Mena. Debido a esas presiones, Heikal explicó que "es necesario o dar otra oportunidad al Gobierno o formar uno nuevo".

El viceprimer ministro del Gobierno egipcio, Ali al Selmy, dijo que las elecciones parlamentarias, que deberán comenzar dentro de una semana, "van a celebrarse en su fecha, incluso si se forma un nuevo Ejecutivo". En declaraciones en la sede del Consejo de Ministros, recogidas por la agencia oficial Mena, Al Selmy dijo que el mantenimiento de los comicios es una decisión del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas.