El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ha pedido este sábado al presidente de Siria, Bashar al Asad, que las autoridades del país respeten los derechos fundamentales de su pueblo y actúen con contención, tras la sangrienta represión de las protestas populares en varias ciudades del país. Ambos han hablado este sábado por teléfono sobre la delicada situación que atraviesa Siria, que se ha visto sacudida por las manifestaciones contra el régimen que encabeza Asad. Ban ha resaltado en la conversación que los pueblos a lo largo de Oriente Medio están expresando sus aspiraciones democráticas mediante métodos pacíficos, y ha recordado que los gobiernos "tienen la obligación de respetar y proteger los derechos fundamentales de sus ciudadanos", ha explicado en un comunicado la ONU. Máxima contención "El secretario general ha instado a que las autoridades actúen con la máxima contención y ha expresado su deseo de que se responda de manera significativa a las legítimas expresiones de preocupación", agrega la nota. Al menos 20 personas perdieron la vida este viernes en la localidad sureña de Sanamein por disparos efectuados por la policía para disparar una manifestación, según la cadena catarí de televisión Al Jazira. Esta emisora informó de la muerte de otro manifestante en la ciudad sureña de Deraa, cerca de la frontera con Jordania, aunque reconoció que no pudo verificar independientemente el número de víctimas. También ha habido protestas en otras ciudades sirias, incluida Damasco, pero no se tienen noticias sobre la posibilidad de que en esas manifestaciones haya habido víctimas.