La OTAN acordó ayer asumir el mando militar de las operaciones de vigilancia de la zona de exclusión aérea sobre Libia, anunció el secretario general de la Alianza, Anders Fogh Rasmussen. La dirección por parte aliada se hará efectiva "en las próximas horas", según dijo una portavoz de la organización.

Además, la OTAN va a empezar la planificación militar para una posible toma de control de todas la operaciones, lo que incluiría los ataques a objetivos terrestres para proteger a la población civil libia. Las autoridades militares y políticas de la Alianza mantendrán encuentros con ese fin durante los próximos días.

"Todos los aliados de la OTAN están comprometidos a cumplir con sus obligaciones bajo la resolución de la ONU. Por eso hemos decidido asumir la responsabilidad de la zona de exclusión aérea", explicó Rasmussen en un comunicado. Las decisiones se tomaron tras una reunión de los embajadores aliados, por séptimo día consecutivo, para tratar de fijar el papel de la organización en las operaciones militares en Libia.

El mando estratégico de las operaciones estará en el Cuartel General aliado para Europa, en la ciudad belga de Mons, mientras que el control táctico se desarrollará desde el centro que la OTAN tiene en Nápoles, que también se responsabiliza del submando naval. El submando de las operaciones aéreas residirá en el cuartel aliado de Esmirna.

"Emprendemos la acción como parte del amplio esfuerzo internacional para proteger a los civiles de los ataques del régimen de Gadafi", señaló Rasmussen. Según el secretario general, la Alianza "cooperará con sus socios en la región y agradecerán sus contribuciones".

Varias capitales --especialmente Washington, Londres y Roma-- insistían desde hace días en que la OTAN tomase el control de toda la operación internacional, mientras que Francia se resistía a ceder a la organización la dirección política, en la que deseaba integrar a los países árabes que colaboran con las potencias occidentales. Con ese fin, París acordó con sus socios una reunión de ministros de Exteriores de los países que participan en las acciones, que tendrá lugar el próximo martes en Londres.

Fuentes aliadas, en cualquier caso, dejaron ayer claro que el Consejo Atlántico --la máxima autoridad decisoria de la OTAN-- "tiene el control total" de sus operaciones. Eso no quiere decir que no acepte --y anime-- la participación de estados no miembros, con los que colaborará en la toma de decisiones, tal y como hace por ejemplo, con los 20 países que apoyan su misión en Afganistán.

Hasta ayer, Turquía --el único país de mayoría musulmana dentro de la Alianza-- mantuvo importantes reticencias a verse involucrada en los bombardeos sobre territorio libio.

DERRIBO DE AVION LIBIO Una patrulla del Ejército francés disparó ayer contra un avión del Ejército libio" que violaba la resolución 1973 del Consejo de Seguridad de la ONU cuando el aparato acababa de aterrizar en una base militar. La operación, de la que no se precisa el momento en el que ocurrió, sucedió durante una de las misiones del Ejército francés en la zona de Misrata, precisaron las fuentes, y la patrulla de aviones Rafale hizo un disparó "aire-tierra".