El Parlamento de Yemen ha aprobado este miércoles, a pesar de la oposición de los manifestantes que reclaman la caída del régimen, el estado de excepción decretado el pasado viernes por el presidente del país, Alí Abdalá Saleh, por 161 votos a favor y 2 en contra. Los grupos de la oposición han convocado para el viernes una gran marcha que culminará ante el palacio presidencial para exigir la salida de Saleh. Saleh impuso el estado de excepción, que se prolongará durante 30 días, coincidiendo con la matanza de 45 manifestantes opositores al régimen el pasado 18 de marzo durante una protesta contra el régimen en los alrededores de la Universidad de Saná. Los disturbios entre detractores y partidarios del régimen y las agresiones contra propiedades privadas y públicas han sido los argumentos esgrimidos por el Gobierno para justificar el estado de emergencia. El Ejecutivo considera que estos últimos incidentes amenazan la unidad nacional y la paz social. El estado de excepción, que votaron 163 diputados de los 301 que hay en el Parlamento yemení, fue aprobado después de que Saleh intentara el martes ofrecer una salida a la crisis política que atraviesa el país y anunciara que entregará el poder antes de finales de año. Aun así, los opositores al presidente le reclaman que abandone su cargo de forma inmediata, como lo hicieron los presidentes de Túnez y Egipto, después de que los ciudadanos de estos países protagonizaran manifestaciones masivas para reclamar más libertades y la instauración de un sistema democrático. Marcha hacia el palacio presidencial Es por ello que los grupos opositores han organizado una nueva protesta multitudinaria para este viernes. "El viernes será el Viernes de la Marcha hacia Adelante", con cientos de miles de personas. "Iremos dónde estás y te echaremos del poder", ha señalado Mohamed Qahtan, portavoz de la oposición, dirigiéndose al presidente. Yemen es escenario de protestas políticas contra el régimen de Saleh desde el pasado 27 de enero, aunque las manifestaciones se intensificaron a mediados de febrero pasado. En los últimos días ha sido constante el goteo de dimisiones de militares, miembros del gobierno y diplomáticos en protesta por la represión violenta de los manifestantes que ya ha causado decenas de muertes y centenares de heridos..