El Movimiento del 20 de Febrero pidió hoy al pueblo marroquí que participe de forma masiva en las manifestaciones que ha convocado para el día 20 de marzo, y en las que se reivindicará el establecimiento de una asamblea constituyente que otorgue a Marruecos una nueva Constitución. A través de un comunicado, el movimiento juvenil aseguró que seguirán las movilizaciones hasta alcanzar todas sus demandas. Respecto a la comisión que nombró la semana pasada el Rey Mohamed VI para reformar la constitución marroquí, los jóvenes reiteraron que "una constitución democrática se deriva de la voluntad popular y se establece a través de una asamblea constituyente elegida democráticamente". El pasado jueves en el Palacio Real de Rabat, el rey Mohamed VI presidió la ceremonia de creación de la comisión consultiva que se encargará de una reforma constitucional. Hoy, los jóvenes señalaron que la decisión del monarca muestra que "el régimen no ha abandonado su política de las constituciones otorgadas que mantiene desde la primera Constitución". El Movimiento de 20 de Febrero, que pidió el fin de la política del monopolio económico, reclamó también "la disolución del Gobierno, del Parlamento y que se despida a todos los funcionarios involucrados en la corrupción financiera y política". A las reivindicaciones ya formuladas, los jóvenes agregaron nuevas demandas sociales como la garantía a un amplio acceso a los servicios de sanidad y de educación, el derecho al empleo, la reducción del coste de vida y un aumento del salario mínimo. Por otro lado, el Consejo Nacional de Apoyo al Movimiento de 20 de Febrero (CNAM) reiteró hoy durante una rueda de prensa en Rabat su apoyo a las sentadas y a las marchas previstas para el próximo domingo, y pidió que se mantenga el aspecto pacifico en las protestas. El CNAM, que incluye más de cien organizaciones civiles y políticas, consideró que "el discurso del rey Mohamed VI debe ser el comienzo de un dialogo nacional en el que participen todas las fuerzas democráticas del país, incluido los jóvenes del 20 de Febrero, y que lleve así a una constitución democrática". Decenas de miles de marroquíes salieron el pasado 20 de febrero a las calles de las principales ciudades del país para pedir "una constitución democrática y la disolución del Gobierno y el Parlamento".