Colin Powell era secretario de Estado de EEUU durante la invasión de Irak y el hombre que presentó el caso de las armas de destrucción masiva en la ONU el 5 de febrero del 2003. Powell, que dimitió de su cargo en noviembre del 2004, explica en esta entrevista que se dio cuenta de que no había armas de destrucción masiva dos meses después del comienzo de la guerra.

--¿Como ve a Irak hoy en día?

--Estoy contento de que nuestras operaciones de combate hayan acabado. También estoy feliz de que Irak ya no esté gobernado por Sadam Husein. La actual crisis de Gobierno acabará pronto, y será solucionada por métodos democráticos. Al principio fue fácil, pero cuando hubo necesidad de construir y crear algo en Irak, comenzamos a ver los problemas. Especialmente cuando brotó la insurgencia. Si uno no presta atención a la seguridad, no se puede construir un país y crear la sociedad de la posguerra. Uno no puede hacer eso con aviones volando sobre las cabezas de la gente. Eso se hace con gente sobre el terreno. La guerra en Irak no ha acabado. Todavía hay grupos insurgentes activos.

--¿Cuándo supo a ciencia cierta que no había armas de destrucción masiva en Irak?

--Dos meses después del inicio de la invasión. Personalmente, siempre lamentaré que la labor de nuestro espionaje fuera errónea e incorrecta. No había armas de destrucción masiva en Irak. En aquel entonces, me pregunté: ´¿Qué es lo que ha pasado? ¿Cómo ha sido posible? ¿Dónde están las armas?´. Seis meses después de eso, nuestros servicios de espionaje todavía aseguraban que había armas de destrucción masiva en Irak, sostenían que tarde o temprano algo se encontraría. La razón de estos errores fue que no teníamos a nuestra gente sobre el terreno en el país.

--La CBS preguntó en 1996 a la ex secretaria de Estado Madeleine Albright si merecía la pena que 500.000 niños iraquíes murieran por las sanciones internacionales. Albright respondió que sí. ¿Cree usted que merecía la pena?

--Hay que sopesar dos cosas. Hemos perdido a 4.400 soldados. Cada pérdida significa crisis para una familia entera. Miles y miles de iraquíes murieron. ¿Merecía la pena morir por la democracia? ¿Merecía la pena crear democracia? ¿Merecía la pena crear un país así en Oriente Próximo? Todavía es muy pronto para decirlo. La historia nos juzgará por ello.

--¿Da consejos al presidente Obama sobre Afganistán?

--Nos vemos y hablamos muy a menudo. Me pide consejos y yo se los doy. Mantengámoslo en secreto.