La consecuencia inmediata del atentado fallido del viernes contra un avión estadounidense que volaba de Amsterdam a Detroit es que se han extremado aún más las medidas de seguridad en los aeropuertos de EEUU. Las autoridades han remitido a las aerolíneas un nuevo reglamento obligatorio para todos los aviones que sobrevuelen el espacio aéreo de EEUU.

A partir de ahora, los pasajeros solo podrán llevar un bulto de mano, no podrán levantarse de su asiento una hora antes del aterrizaje y la tripulación revisará que nadie lleve objetos en su regazo, ni mantas, ni almohadas ni ordenadores personales, y que los compartimentos superiores para el equipaje de mano permanezcan cerrados hasta que el avión haya aterrizado. También se ha prohibido a las compañías aéreas que hagan uso de los sistemas electrónicos que permiten a los pasajeros ver en tiempo real el recorrido del avión. Los vuelos internacionales serán sometidos a un doble control, por lo que se recomienda a los viajeros calcular un tiempo extra para facturar y embarcar.

PSICOSIS En EEUU se ha desatado una gran psicosis. Y ayer volvieron a saltar todas las alarmas al registrarse otro incidente en el mismo aeropuerto de Detroit y en un vuelo de la misma compañía Northwest también procedente de Amsterdam. Incluso coincidió la nacionalidad del implicado, un nigeriano que, al igual que Omar Faruk Abdul Mutalab, el autor de la intentona fallida del viernes, fue arrestado ayer por la policía nada más aterrizar.

La tripulación empezó a sospechar al comprobar que llevaba casi una hora encerrado en el baño. Cuando le pidieron que abriera la puerta empezó a gritar y a proferir amenazas, comportamiento que fue calificado como "verbalmente violento" y que llevó al piloto a pedir permiso para realizar un aterrizaje de emergencia. Al cierre de esta edición no había indicios de una conexión entre ambos incidentes.

En cuanto al suceso del viernes, nadie parece asumir su parte de responsabilidad. Las autoridades nigerianas aseguraron ayer que Mutalab vivía en el extranjero y llegó al país el mismo día en que viajó de Lagos a Amsterdam. Lo que no aclararon es cómo pasó los controles del aeropuerto. Londres, por su parte, se excusa diciendo que el pasado mayo el Gobierno británico denegó el visado a Mutalab.

EXPLOSIVO Las primeras investigaciones llevadas a cabo por los agentes del FBI han confirmado que entre los restos del artefacto que intentó activar Omar Faruk Abdul Mutalab había tetranitrato de pentaeritritol, un explosivo conocido como pentrita.

El presidente de EEUU, Barack Obama, ha ordenado una revisión exhaustiva de la actual normativa de seguridad aérea.