LA COBERTURA

El principal objetivo de la reforma es que todos los estadounidenses tengan seguro, algo de lo que ahora no disponen unos 50 millones de personas. Los mayores de 65 años están cubiertos por el plan Medicare. El 45% de los más pobres y parte de los discapacitados y los niños cuentan con Medicaid y con el plan de salud infantil.

LOS COSTES

La reforma busca reducir y controlar los costes del sistema sanitario, calculados para este año en 1,7 billones de euros, o 5.600 euros por ciudadano. Los no asegurados pagan el 33% de sus gastos y la mayor parte del resto (el 75%) queda a cargo de los estados o del Gobierno federal.

RETICENCIAS

Uno de los factores que explican el descenso de apoyo ciudadano al proyecto de Obama es que el 90% de los votantes sí tienen seguro. 40 millones lo tienen privado y 160 millones aportado por su empleador. Para las empresas es voluntario dar la prestación. Obama quiere hacerlo obligatorio.

EL CONFLICTO

La pregunta clave es ¿cómo financiar la reforma? Una propuesta es subir los impuestos al 5% de la población con ingresos de más de 175.000 euros (aunque los demócratas podrían elevar la cifra límite hasta los 350.000 o 700.000). La Administración defiende un mercado más libre para acceder a los seguros.