Conciertos, exposiciones, actos oficiales y un llamamiento a dedicar 67 minutos del día a servicios comunitarios --uno por cada año que el ex presidente Nelson Mandela dedicó a la lucha por la libertad-- sirvieron ayer para conmemorar el 91º aniversario del surafricano más universal.

Una llamada que fue seguida por miles de ciudadanos en todo el país, empezando por el propio presidente, Jacob Zuma, quien ayer dedicó el tiempo de servicios comunitarios a visitar un asilo de ancianos. Este año, además, no se trata solamente de honrar una vez más la figura del Madiba (padre), tal y como sus conciudadanos le conocen afectuosamente, sino de lanzar oficialmente la convocatoria del Día de Mandela.

Una propuesta que pretende "recuperar los valores" que encarna el ex presidente y darles "la dimensión global que tiene su figura", según explicó Verne Harris, director de programas del Centro Memoria y Diálogo-Fundación Nelson Mandela.

Una dimensión que resaltó el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, quien en un comunicado se refirió a Mandela como "un ciudadano global ejemplar". Quizás por esto los festejos del aniversario llegaron hasta a Nueva York, donde se celebró un concierto, impulsado por Stevie Wonder y Aretha Franklin.