El presidente ruso, Vladimir Putin, se dirigió ayer al país para pedir a los electores rusos que acudan a votar por el candidato del Kremlin, Dmitri Medvédev, en las elecciones presidenciales del domingo. "No debemos dejar que termine el movimiento de Rusia hacia adelante. Hay que continuar los cambios positivos. Para conseguirlo, nos hemos planteado tareas difíciles y de gran importancia para los próximos años", dijo el presidente ruso en un discurso televisado en la víspera de la jornada de reflexión que se celebra hoy.

Aunque Putin no mencionó directamente el nombre de su heredero oficial, cosa que le prohíbe la ley electoral, quedó claro a quién se refería el máximo dirigente, que destacó la importancia de la "continuidad" en el Kremlin durante el próximo mandato electoral. "Todos entendemos el papel tan grande y responsable que es el del líder del Estado de Rusia. Y lo importante que es para él tener la fe de sus ciudadanos. La necesita para hacer un trabajo eficaz y confiado en su puesto presidencial, para asegurar la estabilidad del país. Les pido que vayan a votar el domingo. Y que voten por nuestro futuro juntos", dijo Putin.

El discurso, que apenas duró cinco minutos, sonó como pura formalidad dado que Medvédev, de 42 años, el actual viceprimer ministro, viejo protegido y colaborador de Putin, tiene garantizado al menos un 70% de los votos, según los últimos sondeos. Sin embargo, el Kremlin está deseoso de que la participación se acerque a los dos tercios para dar el máximo de legitimidad al próximo líder.

MANIFESTACION La victoria de Medvédev podrían empañarla las protestas de Otra Rusia, una alianza prooccidental dirigida por el ex campeón mundial de ajedrez Garry Kaspárov. Los partidarios de Kaspárov, a quien las autoridades le impidieron registrarse como candidato, anunciaron que se manifestarán el lunes en el centro de Moscú.