La OTAN, que dirige la fuerza internacional de pacificación de Kosovo (Kfor), advirtió ayer tras la declaración de independencia de la provincia serbia que "responderá con rapidez y firmeza contra cualquiera que intente recurrir a la violencia en Kosovo". La Kfor cuenta actualmente con unos 16.000 soldados desplegados en el territorio. El secretario general de la Alianza Atlántica, Jaap de Hoop Scheffer, efectuó un llamamiento a todas las partes involucradas a que extremen al máximo la contención y la moderación. De Hoop Scheffer insistió en que las fuerzas de la OTAN continuarán en Kosovo para "ofrecer seguridad a todos los ciudadanos de Kosovo".