El líder norcoreano, Kim Jong-il, de 65 años, desmintió ayer los rumores sobre su salud. "Se dice que sufro diabetes o problemas cardiacos, pero no es verdad", afirmó. El miércoles, Kim ya habló de su salud cuando afirmó: "No soy un paciente". En la prensa extranjera aparecen a menudo todo tipo de especulaciones sobre la salud de Kim. Un diario británico afirmó recientemente que el amado líder no podía andar más de 30 metros. El pasado mayo, un equipo de médicos alemanes viajó a Pyongyang, lo que disparó los rumores sobre una operación de corazón.