La universidad, los sindicatos y las fuerzas políticas de izquierdas, además de actores y artistas, se han aliado contra la guerra. Los máximos dirigentes de PSOE, IU, CCOO y UGT, al frente de más de 200 organizaciones cívicas, lanzaron ayer el manifiesto No a la guerra , que pide la participación el sábado en las 57 manifestaciones convocadas en España y pongan banderas blancas en las ventanas. 43 rectores apoyaron la iniciativa y 400 profesores iniciaron un encierro en la Universidad Autónoma de Madrid.

"Lo que persigue el señor Bush es cambiar sangre por petróleo", clamó el secretario general de la UGT, Cándido Méndez. José Luis Rodríguez Zapatero, líder del PSOE, empeñó su palabra en evitar la guerra: "Queremos desarmar a Sadam sin guerra; juntos podemos hacer rectificar al Gobierno del PP y disuadir a Bush".

AZNAR, EN MINORIA

Gaspar Llamazares, de IU, aseguró que "Aznar se encuentra en minoría, ya que hasta su electorado rechaza la guerra". José María Fidalgo, de CCOO, pidió salir a la calle "por principios éticos", dijo que "no somos antiamericanos" y que "Aznar no defiende la civilización ni los intereses del país".

Cuarenta y tres de los 70 rectores de universidad mostraron ayer en un manifiesto su apoyo a las iniciativas "contra una posible acción de guerra en Irak". Mientras, más de 400 profesores de la Autónoma de Madrid se encerraron ayer para expresar su rechazo a la guerra. Esa iniciativa y un texto contra la guerra han recibido el apoyo de 3.000 docentes. Además, la minoría progresista del Consejo General del Poder Judicial propondrá hoy al pleno un manifiesto contra la guerra.