Dos obras de juventud separadas entre sí por un lapso de veinticinco años componen el programa del próximo concierto de abono de la Orquesta de Córdoba, en el que tendremos ocasión de escuchar a la pianista donostiarra Judith Jáuregi. Compuesto durante el verano de 1830, el Concierto para piano de F. Chopin (1810-1849) fue estrenado por el propio autor en noviembre del mismo año. En el Allegro maestoso -ampliamente construido, pese a la aparente libertad-, el primer tema es de aire decidido, casi marcial, y el segundo es más melódico y lírico, mientras la Romanza es premonitoria de los Nocturnos: «Mantenida por un sentimiento romántico, tranquilo, en parte melancólico…», según el autor. Finaliza con un Rondó (Vivace) tensado entre dos temas; el primero, caprichoso y brillante; y el segundo vigoroso en su ostinato.

Georges Bizet (1838-1875) consideraba su Sinfonía nº1 un ejercicio escolar; compuesta con 17 años, jamás intentó que se ejecutara; sin embargo, fue redescubierta en 1932 y estrenada en 1935. Deudora de la sinfonía homónima de Gounod, su espíritu se acerca también a Mendelssohn y a Schubert. La obra, de arquitectura clásica, está recorrida por la feliz alternancia entre fuego rítmico y encanto melódico. M.P

CÓRDOBA . TEATRO AVANTI/ VIERNES 17 Y SÁBADO 18 / 21.00 H.