Aunque su posición es extremo, bien por la izquierda o bien por la derecha, dependiendo de la configuración ofensiva, Ferrán Torres se ha revelado como el mejor goleador de la era Luis Enrique en la selección española, con ocho goles en quince partidos, siete en sus nueve encuentros recientes y una media de un tanto cada dos duelos como internacional absoluto.

Ya ha superado a Sergio Ramos, con siete dianas en 15 encuentros con el técnico asturiano, que no ha contado con él en la lista de 24 futbolistas para la Eurocopa 2020 y que no alcanza la cantidad de aciertos del joven jugador valenciano del Manchester City, el más productivo en los 47 goles con Luis Enrique en el banquillo. Álvaro Morata le sigue de cerca, con siete goles en 18 encuentros. Ambos suman dos dianas en la actual competición europea; las mismas que Pablo Sarabia, autor de esos dos goles en sus cinco encuentros a las órdenes del actual seleccionador. Gerard Moreno ha marcado dos en un recorrido de once partidos. Y Mikel Oyarzabal, cuatro en ese mismos número de choques, uno de ellos en la Eurocopa.

Son los goleadores de referencia del grupo armado por el técnico para el torneo, bajo la duda hace apenas una semana, en el empate contra Polonia; desatada luego, con una cantidad de goles inusual en un torneo de esta dimensión, con diez en los dos últimos duelos...

Y el reencuentro de Ferrán Torres. Desde el 3 de septiembre de 2020, con su debut en el 1-1 contra Alemania, cuando ya disputó todo el choque en Stuttgart, al segundo duelo se estrenó como goleador, en el 4-0 contra Ucrania. Cuatro partidos después, hizo un 'triplete' a Alemania. Después marcó un gol en el 1-2 a Georgia y otro en el 3-1 a Kosovo antes de su racha ante Eslovaquia y Croacia. Ha necesitado cinco tiros para tal producción en la cita europea. Dos fueron contra Suecia, uno bloqueado y otro fuera; otro contra Polonia, también fuera; uno contra Eslovaquia, que fue gol, y otro contra Croacia, que también lo fue, para personificar con una pegada incontestable la eclosión actual que vive la selección española.

Porque si algo ha aportado el desbordante extremo del Manchester City a la selección española es esa capacidad tremenda para el gol, para estar en el momento justo en el sitio oportuno, como en el taconazo con el que transformó el 4-0 ante Eslovaquia, o para definir como lo hizo este lunes en octavos de final ante Croacia. También dio una asistencia perfecta en el 1-2 de César Azpilicueta.

A sus 21 años y cuatro meses luce de nuevo en el equipo nacional, justo además en su vuelta a la titularidad tras las suplencias ante Polonia y Eslovaquia. "Tenemos que ir partido a partido, pero podemos soñar", decía al término del 3-5 a Croacia que supuso el pase a los cuartos de final de la Eurocopa contra Suiza del viernes. "Al final, cuando trabajas, tienes tu recompensa, la estamos teniendo y se está viendo", enfocó sobre el gol, tan distante en las primeras dos jornadas, tan visible en los dos últimos encuentros, también en él mismo, que remarca la "tranquilidad" que les transmitió Luis Enrique cuando la efectividad contradecía al juego.

"Cuando ves que estás jugando bien y la pelotita no te entra, es normal que empiezan a entrar un poco de dudas, pero ahí es cuando el jugador debe estar más tranquilo y seguir haciendo lo que está planeado porque esas dudas son dudas peligrosas", expuso entonces Ferrán Torres, que destapa su versión más goleadora con la Roja.

Ni en el Valencia, con nueve tantos en 96 partidos, ni con el Manchester City, con el que promedia una buena suma, 13 en 36 choques bajo la dirección de Pep Guardiola; un 0,36 de media aún lejos del 0,53 con el que se ha transformado en el mejor goleador de la era Luis Enrique.