Una veintena de niños que estuvieron ingresados en el Reina Sofía justo tras nacer, entre el 25 de marzo y el 28 de mayo del 2016, se han reunido por segundo año consecutivo para celebrar la buena evolución de sus pequeños. Algunos de ellos nacieron teniendo que afrontar alguna grave enfermedad al poco de ser alumbrados y la mayoría vino al mundo de forma demasiado prematura o con bajo peso, lo que les obligó a pasar una larga temporada entre la UCI pediátrica y Neonatos, explicaron algunos de los asistentes al encuentro. Para la ocasión, alquilaron un local de celebración con juegos infantiles, donde los niños pasaron un rato muy agradable y los padres y madres se pusieron al día acerca de lo bien que se encuentran sus pequeños, a pesar de aquellos días tan largos pasados en el Reina Sofía.
El gran grueso de estos niños vino al mundo cuando sus madres estaban entre la semana 27 y la 32 de gestación. Hubo ocasión incluso para que los protagonistas de esta cita, estos prematuros que han cumplido todos los dos años de edad, pudieran soplar las velas de una tarta. Una de las asistentes, Marina Toledano Hidalgo, resaltó que «queremos hacer constar nuestro agradecimiento a todo el personal sanitario que trabaja en Neonatos y en la UCI pediátrica del Reina Sofía y a los que están en maternidad por el apoyo que prestan a las familias y animar también desde aquí a todas las madres y padres que ahora están pasando por lo mismo que nosotros, porque sus hijos han nacido prematuros y están hospitalizados».
