La importante ayuda que iba dentro de los contenedores que la Fundación Bangassou envió hace meses desde Córdoba con destino a esta región tan empobrecida de la República Centroafricana, donde el obispo cordobés Juan José Aguirre desarrolla su misión, ya está llegando a las manos de quienes más la necesitan. Una ayuda que es posible gracias a la solidaridad de personas anónimas, empresas y entidades que todos los años realizan sus aportaciones o colaboran en la preparación de estos contenedores. El presidente de la Fundación Bangassou, Miguel Aguirre, explicó que este año se han enviado, además de dos contenedores grandes, un tercero más pequeño que se está repartiendo en Bangui (capital de República Centroafricana), en la denominada Maison Bangassou. El contenedor contiene fundamentalmente leche en polvo, papillas y cereales, que se está repartiendo sobre todo entre orfanatos y organizaciones de ayuda humanitaria.

«Los contenedores llegaron con mucho retraso en junio. Al haber comenzado ya la temporada de lluvias los caminos están embarrados, lo que unido a la situación política tan complicada desde que tuvieron que ser acogidos unos 2.000 musulmanes en la Catedral para evitar ser asesinados por los anti-Balaka, ha provocado que los contenedores sigan estando en Bangui. Pero con vehículos más pequeños se está transportando progresivamente esta ayuda hacia Bangassou», señaló Miguel Aguirre. El presidente de esta fundación indicó que «lo primero que se ha trasladado a Bangassou ha sido leche en polvo y medicamentos que hacían mucha falta y también combustible». Hace 3 años que ningún equipo de médicos voluntarios se puede desplazar desde Córdoba a Bangassou para realizar operaciones y revisiones allí. «Los únicos que sí estaban yendo cada año todos los meses de agosto eran un equipo de oftalmólogos, pero de momento hemos suspendido la expedición que teníamos prevista para el mes próximo teniendo en cuenta la violencia que persiste», añadió Miguel Aguirre.