Por tercer año consecutivo, la Asociación Defensores y Amigos del Puente Romano, de Villa del Río, ha organizado la Ruta de los Farolillos, una antigua tradición que desapareció en esta localidad y que este colectivo recupera cada verano gracias a la gran participación de los villarrenses. En esta edición, la Asociación dedicó esa noche a las Aceñas del Guadalquivir, un monumento árabe sobre cimientos romanos que marcó antaño el mercado harinero y textil de la comarca. Tras una ruta por las calles del pueblo, donde los pequeños exhibieron sus farolillos encendidos, se dirigieron a las Aceñas donde la asociación, con la ayuda de unos folletos adaptados a los más pequeños, ofreció una charla didáctica sobre este monumento impartida por la historiadora Lidia Valverde Alba. A esto, se acompañó una suelta de globos en la que se pidieron deseos por la recuperación de las Aceñas y del Puente Romano, que continúa en riesgo de ruina y a la espera de una consolidación. También se celebró el concurso de farolillos que esta asociación realiza año tras año, con premios también dirigidos a difundir el patrimonio. Se premiaron a los mejores sandías. R. CASTRO