El concejal popular Salvador Fuentes tiene problemas con el atril de su grupo municipal, demasiado alto para él, y ayer se quejaba de que se hacen a medida de otros políticos más altos, hasta confesó haber trucado uno en Diputación. Al final, como es habitual en él, acabó por sentarse a la mesa para dar la rueda de prensa. Necesita un miniatril.