Hace unos días me sorprendió un tuit de Raúl Bravo pidiendo la vuelta de su gran amigo Uli Dávila al Córdoba. No en vano, ambos fueron héroes a su modo del ascenso a Primera en Gran Canaria. Ayer, el destino fue caprichoso y les deparó un final común. Uli deseó también lo mejor a su 'papá' de ahora en adelante. Y es que ambos han acabado fuera del equipo que los encumbró con el ascenso.