La obra de García Lorca Amor de don Perlimplín con Belisa en su jardín se traslada, según el sueño de su autor, a la música, en este caso flamenco, girando en torno al cante, beile y toque. Rosario Toledo, bailaora, personifica a Belisa; el cantaor José Valencia representa a don Perlimplín; y el guitarrista Dani de Morón, al misterioro hombre que ama a Belisa.