No son los 'millarium' de los romanos, aquellos monolitos que señalizaban cada milla romana (1.480 metros) en esa misma calzada. Pero sí son sus herederos en este siglo XXI. El caso es que el Aula de la Naturaleza Nicolai Masyuk, de la Universidad de Córdoba, junto a la Asociación de Amigos del Camino de Santiago de Córdoba y la federación nacional inauguraron ayer las balizas de la primera etapa desde Córdoba del Camino Mozárabe, la que une la ciudad califal con Cerro Muriano siguiendo la Item ab Corduba Emeritam .

El escenario fue la avenida de Carlos II, donde se descubrió el primero de los monolitos de granito instalados para reivindicar los valores culturales, históricos, naturales, geológicos y (todo hay que decirlo) económicos que tiene el Camino Mozárabe, demostrando "que se ha sabido invertir bien el dinero público", dijo Carmen Blanco Valdés, directora general de Cultura de la UCO. Junto a ella, entre otras personalidades, estuvieron la concejala Laura Ruiz, la presidenta de la federación nacional jacobea, María Angeles Fernández, y el director del Aula, José Manuel Recio, todos ellos en un acto distendido con peregrinas llegadas de Málaga.

"Moita grazas", concluyó la Carmen Blanco en su condición de gallega. Quizás las mejores palabras, junto a "bon camiño", para seguir las balizas y, después, continuar hasta Santiago.