El sótano del mercado de abastos del distrito de Pueblonuevo fue ayer el lugar elegido por el parque de bomberos de la localidad para el simulacro de un incendio de un vehículo que tras chocar tenía atrapada una persona. Un ensayo que se tuvo que retrasar porque los participantes tuvieron que acudir a un incendio real en una vivienda de la calle Doctor Fléming. Cinco efectivos y tres vehículos fueron necesarios para sofocar el fuego que quemó casi todo el inmueble, que se saldó sin daños personales.

Ya en el simulacro, 14 efectivos del parque de Peñarroya y de Pozoblanco se dispusieron a realizar la complicada y extenuante práctica de extinción del incendio para estar preparados a la hora de encontrarse con explosiones súbitas generalizadas, mientras realizan el rastreo con cuerdas para el rescate de la víctima. El párking, con más de 1.000 metros cuadrados, estaba repleto de obstáculos para elevar la dificultad, lo que sumado al humo que impedía la visibilidad hizo que la práctica ganara en espectacularidad. La finalidad, ha explicado Carlos González, jefe de turno y promotor del simulacro, es ensayar en las instalaciones por si sucediera algo parecido y adiestrar al personal en la técnica de ataque a un fuego en párking y la búsqueda y buceo en humo de víctimas.

El amplio despliegue y la frenética actividad desarrollada consiguieron asombrar a los vecinos que se dieron cita en el lugar.