Chico Medina, cocinero

Ayer, a las 8.30 horas, murió en Córdoba el prestigioso cocinero cordobés Francisco Medina Navarro, conocido popularmente con el sobrenombre de Chico Medina. Hoy, a las 13.00 horas, en la capilla del Tanatorio de Córdoba, en el polígono de las Quemadas, se celebrará la misa de corpore in sepulto. Había nacido en Espejo el 3 de octubre de 1945. Tenía poco más de diez años cuando se viene a Córdoba con su familia. Hombre inquieto, se va a escorar hacia el mundo de la gastronomía. Hacía ese arte de preparar una buena comida. Tenía 15 años cuando marcha a Mallorca, estudiando en la primera escuela de hostelería. De su paso por la isla quedan sus principios entre pucheros y ollas en el hotel Bonsol. Regresa a Córdoba y hace su servicio militar en el regimiento de artillería número 42, en el viejo cuartel de la avenida de Medina Azahara. Se licencia y empieza a trabajar en el bar California (Sector Sur). Más tarde, en La Torrecilla con Pepe García Marín para, unos años después, irse con él al restaurante El Caballo Rojo en la calle Deanes. Entre 1971 a 1991 trabaja con tan reputado y citado profesional de la cocina cordobesa. Fue cocinero segundo y, más tarde, jefe de cocina. El 28 de febrero de 1971 se casa con la cordobesa Emilia Ponferrada Luna. Tuvieron dos hijos, Francisco Javier y Raquel, que han seguido su estela trabajadora en el mundo de la cocina tradicional cordobesa. En el año 1991 se asocia con unos amigos en la Sociedad de Plateros del callejón sin salida de la calle Cruz Conde. Más su etapa en El Caballo Rojo le brinda la oportunidad de viajar con su jefe por todo el mundo, promocionando la cocina andaluza o mozárabe. Hasta Manchester, Filipinas, Alemania y Puerto Rico llegaron con este empeño. En la televisión de este último país, participa en un programa gastronómico. También recorrió toda España y ha cocinado para anteriores jefes de Estado y presidentes, incluido Felipe González en la Moncloa. En 1978 obtuvo la Sartén de Oro y la Sartén de Plata por sus creaciones Riñones a la serrana con níscalos y Alcachofas a la montilla , respectivamente, en el concurso de grastronomía celebrado en el Círculo de la Amistad. También intervino en varios programas televisivos como Con las manos en la masa de Televisión Española, así como en Canal Sur en Tal como somos y, últimamente, en la Televisión Municipal. El año 1994 va a marcar un punto de inflexión en su vida. Cae enfermo de gravedad y se disuelve la sociedad del establecimiento antes citado de la calle Cruz Conde. En 1995 resurge el viejo luchador y monta su negocio propio en la calle Díaz del Moral, en pleno centro de Córdoba, y al llama restaurante Rincón de Chico Medina, que tan acertadamente lleva su hijo Francisco Javier y su yerno José Angel. Era un buen aficionado al fútbol y lector diario de la prensa. Su familia y sus buenos amigos conformaron su vida. Ha dejado un gran vacío en su esposa, sus hijos y, sobre todo, sus nietos Alejandro y Raquel. Descanse en paz. JOSE CRUZ GUTIERREZ