El PSC acusa a ERC de "enterrar" el tripartito de izquierdas en Barcelona

Jaume Collboni no renuncia a su propósito de intentar arrebatarle la alcaldía a Xavier Trias por muy difícil que se le ponga la aritmética para lograrlo y por mucho que el candidato de Junts le tienda la mano. El PSC acusa a ERC de haber "enterrado" la posibilidad de tejer una alianza a tres con los Comuns, pero aún así los socialistas se han comprometido a seguir intentándolo y han advertido que seguirán negociando con todas las formaciones a excepción de Vox. Admiten que eso incluye que en la ecuación pueda intervenir el PP, cuyos tres concejales serían clave para superar la mayoría de 21 necesaria para que el dirigente socialista logre la vara también con el apoyo de los nueve representantes que ha obtenido el partido de Ada Colau.

Así pues, con ERC fuera de la suma, lo que necesitaría Collboni, que en campaña dijo que no intentaría ser alcalde si no ganaba, es que Daniel Sirera ejerciera el rol que en 2019 hizo Manuel Valls. El candidato de los populares, que se reunió el martes y el miércoles tanto con Collboni como con Trias, mostró este jueves predisposición para explorar esta posibilidad, aunque puso como condición que la hasta ahora alcaldesa debería irse y que su partido se quedara en la oposición. Otra cosa es si esta vez los Comuns estarían dispuestos a entrar en un gobierno municipal con esos votos y renunciado tanto a la alcaldía como a su líder. Y la respuesta, aseguran, es que no.

Los morados insisten por activa y por pasiva que el acuerdo debe ser entre las tres formaciones de izquierdas y se resisten a renunciar a que Colau tenga opciones de optar a la alcaldía. Fuentes de los Comuns aseguran que, si el día 16 de junio -el día antes de la constitución de los ayuntamientos- no hay un pacto con PSC y ERC, sus concejales votarán a Colau y evitarán cualquier otra alianza para que Collboni se salga con la suya. "Pedimos máxima generosidad a todas las partes. Cuando hay empate -en referencia a los socialistas- también tienes que ceder", dejan caer sin renunciar a fórmulas que no pasen por una alcaldía de cuatro años solo para el PSC.

Contra la "lógica del procés'"

En la intervención de la número tres de la candidatura, Laia Bonet, que es la portavoz de las negociaciones por parte del PSC y la encargada de hacer la radiografía de situación, ha acusado a los republicanos de haber sucumbido de nuevo a "la lógica del 'procés' en lugar de a la lógica del progreso", motivo por el que ha dado ya por imposible esa suma. Pero, a pesar de dar por cerrada esta opción, ha dejado claro que su partido "no renuncia a nada" y que mantendrá hasta el final la candidatura de Collboni, cosa que supone que el PSC exprimirá todas las opciones para que Trias no se lleve la vara.

Justamente, el candidato de Junts ha planteado este viernes una alianza con ERC y el PSC que los socialistas han dado por descartada, al mismo tiempo que posconvergentes y republicanos están "analizando las posibilidades" de tejer un gobierno compartido. "Barcelona merece abrir esta nueva etapa y no haremos otra cosa que hacerlo posible", ha subrayado. Y es que los de Collboni mantienen que del resultado de las urnas del 28 de mayo se desprende que los ciudadanos han apostado por un "cambio" y que este sea con sello "progresista".

PSC, Comuns y ERC suman un total de 24 concejales, pero Bonet ha lamentado que ERC haya optado por un "frente independentista" en lugar de mirar hacia la izquierda. Con ese relato, lo que plantean los socialistas es que se debe construir un acuerdo que impida que Barcelona quede "supeditada a intereses de partido como los de 2019" y se entregue a la "política de bloques" que, a su juicio, fomentan los independentistas.

Un 'no' en público y en privado

Fue el presidente de los republicanos, Oriol Junqueras, quien este miércoles compareció desde el Parlament para defender que se prioricen las alianzas independentistas y, en el caso de Barcelona, sea Xavier Trias el alcalde. Una apuesta que lanzó justo después de que el 'president' Pere Aragonès abogara por un "frente democrático" para las elecciones generales del 23 de julio, unos comicios que enfrentarán de nuevo al PSC y a ERC y que condicionan las negociaciones de los pactos municipales. Según los socialistas, los republicanos han trasladado también en privado que no piensan promover que Collboni sea alcalde. "ERC está traicionando a miles de electores que pensaban que votarlos a ellos era votar una formación de izquierdas", ha sentenciado, además de llamar a impedir que llegue al Ayuntamiento "la inestabilidad" y el "agujero negro del 'procés'" del otro lado de la plaza de Sant Jaume, es decir, de la Generalitat.