Guerra en Ucrania

Diez países de la UE mantienen la presión para terminar con la unanimidad en política exterior

El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, recalca que Bruselas tiene que explorar todas las posibilidades para evitar que un Estado miembro bloquee la toma de decisiones

El Alto Representante de Política Exterior de la UE, Josep Borrell, y el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares.

El Alto Representante de Política Exterior de la UE, Josep Borrell, y el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares. / CONSEJO EUROPEO/FRANCOIS LENOIR

Silvia Martínez

¿Debería la Unión Europea terminar con la unanimidad en la toma de decisiones de política exterior y pasar a la mayoría cualificada? Una decena de países, entre los que figuran Alemania y España, consideran que ha llegado la hora de avanzar en esta dirección. "Para que la UE sea percibida como un actor geopolítico y asuma la responsabilidad, necesitamos más decisiones por mayoría calificada. No proponemos una revolución, sino una evolución sobre la base de los tratados existentes", ha explicado este lunes la ministra alemana de Exteriores, Annalena Baerbock, anfitriona de una iniciativa lanzada a principios de mayo que secunda sin fisuras el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell.

"Siempre he pedido que se vote por mayoría cualificada porque si no está claro que somos demasiado lentos en la toma de decisiones, pero qué le voy a hacer", recordaba a su llegada a la reunión de jefes de la diplomacia europeos tras un desayuno de trabajo al que han asistido los representantes de los diez países. Además de Alemania y España también apoyan la idea de terminar con el derecho de veto en la decisiones de política exterior Francia, Italia, Bélgica, Finlandia, Luxemburgo, Holanda y Eslovenia.

Evitar el bloqueo

"Los grande cambios en la UE siempre empiezan con una vanguardia de países que tienen claro hacia donde debe moverse la UE", ha recordado el jefe de la diplomacia española, José Manuel Albares, que ha anunciado que su intención durante la próxima presidencia semestral de la UE, que arranca el 1 de julio, será seguir presionando en esta dirección. Se trata de explorar todas las posibilidades para evitar que los gobiernos puedan bloquear decisiones a nivel europeo e impedir avances. Según Albares, la agresión rusa a Ucrania ha hecho que todos los gobiernos europeos tomen conciencia de lo importante que es que la voz de la Unión Europea sea rápida, eficaz y ágil.

"Ha habido un cambio de percepción de la UE. Durante años se le criticaba por ser lenta, burocrática, estar muy alejada de las necesidades de los ciudadanos y tanto la respuesta a la crisis del covid como a la agresión de Ucrania nos ha demostrado que la respuesta puede ser rápida y ágil. Yo creo que el paso a la mayoría cualificada en materias como política exterior y de seguridad es un avance para que aquel que no se sienta cómodo con alguna medida no obstaculice a los demás", ha insistido sobre una realidad que será todavía más importante ante una futura ampliación de la Unión Europea. "Si queremos pensar seriamente en la ampliación, tenemos que repensar las reglas por las cuales nos organizamos para tomar decisiones de manera eficaz y rápida", ha reivindicado Albares.