CONGRESO DE LOS DIPUTADOS

El Gobierno pasa página al 'shock' del 'sólo sí es sí' con el impulso de la ley de familias

El proceso para aprobar esta norma se prevé tortuoso, no obstante, y este lunes dejó un aviso: PSOE y Unidas Podemos evitaron que ERC presentara una enmienda a la totalidad y complicara el futuro de la ley

La secretaria general de Podemos y ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra.

La secretaria general de Podemos y ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra. / EP

Ángel Alonso Giménez

Unidas Podemos se ha propuesto sacar adelante como sea, y lo más pronto posible, la nueva ley de familias, han informado fuentes parlamentarias a El Periódico de España, del grupo Prensa Ibérica. Se trata de la última norma emblemática de los ministerios de la formación “morada”, en este caso de Derechos Sociales, que dirige Ione Belarra. Tras el varapalo del "sólo sí es sí", se trata de una apuesta y de una urgencia.

El grupo socialista facilitará que así sea. No está encabezando la negociación con los grupos por ahora, ya que ese papel lo ha asumido Unidas Podemos, pero contribuirá a impulsar la norma. Están trabajando codo con codo, lo cual, tras la fractura que ha abierto la ley del 'sólo sí es sí', es una muestra de sintonía a destacar.

Este lunes pudieron experimentarla los representantes de ERC. Los del PNV, más que experimentarla, la sufrieron. Ocurrió lo siguiente. Acababa el plazo de presentación de enmiendas a la totalidad de la ley de familias a media tarde. Que el grupo de Aitor Esteban registrara una estaba dentro de lo previsto porque los nacionalistas vascos, hace semanas, comunicaron al Gobierno que no les agradaba en absoluto la delimitación competencial.

Los nervios florecieron cuando ERC informa a los partidos del Ejecutivo que presentarán otra. Si a los rechazos de la derecha, desde el PP a Cs, se unen los de dos aliados parlamentarios cruciales, la ley estrella de Ione Belarra, quizá más que la de bienestar animal, se torcería en exceso. Terreno peligroso. PSOE y Unidas Podemos se ponen manos a la obra para disuadir a Esquerra.

Los interlocutores republicanos argumentan su "no" en el ámbito competencial de la ley, claramente invasivo, según su criterio. Unidas Podemos busca soluciones dentro del contenido del proyecto. Al mismo tiempo, el Gobierno hace un movimiento clave. Minutos antes de que acabe el plazo, usa su mayoría en la Mesa del Congreso para pedir una ampliación del periodo de presentación de enmiendas a la totalidad y al articulado de la norma. Había que ganar tiempo como fuera.

La Mesa del Congreso no está reunida. De hecho, no prevé hacerlo este martes, como es habitual, ya que la presidenta, Meritxell Batet, está de viaje oficial en República Checa. Sin embargo, puede tramitar las prórrogas si lo pide la mayoría, es decir, PSOE y Unidas Podemos, es decir, el Gobierno. Es irregular con tan escaso margen, pero es válido. Desenlace: prórroga hasta el 4 de mayo.

Despejado el agobio por los tiempos, las partes desmenuzan el contenido y alcanzan algunos compromisos. ERC decide evitar la enmienda a la totalidad, avanza la Cadena SER y confirman después fuentes parlamentarias a este medio. El PNV estalla, sin embargo. Aitor Esteban publica un tuit de indignación.

El "guante" de Esquerra es un primer paso, sin duda, pero ni mucho menos está la ley salvada, añaden fuentes que conocieron la negociación. A partir de ahora, el grupo de Pablo Echenique tendrá que ir limando las diferencias, que son esencialmente competenciales. El PSOE ayudará.

Baza electoral

Una de las fuentes consultadas indica que la idea inicial con la ley de familias era más ambiciosa. Pasaba por exprimir los plazos e intentar la puesta a punto de la ley antes de las elecciones autonómicas y municipales del 28 de mayo. Pero este lunes quedó descartada, como se ha contado. 

Bastaba con que un grupo de la oposición registrara una enmienda a la totalidad de la norma para arruinar la pretensión inicial de Unidas Podemos. Eso ya lo ha hecho el PNV. La aprobación de la norma antes del 28-M, día de urnas, no se va a producir. Viendo como están los ánimos en otras formaciones, ERC sin ir más lejos, es imposible.

No oculta el Gobierno su deseo de convertir sus propias leyes en sus mejores bazas electorales. Son regulaciones que, al fin y al cabo, inciden en la vida diaria de la ciudadanía, en su economía diaria. La de vivienda, por ir a lo reciente, se aprobará el jueves que viene en el pleno del Congreso y recalará en el Senado, en donde se augura un trámite exprés. Uno más.

La de familias apenas ha comenzado su andadura. No hay indicios aún de que el Gobierno vaya a imponer un ritmo alto de tramitación, como ha experimentado la de vivienda, pero Unidas Podemos quiere tenerla lista antes de junio. El PSOE no se opone. Dos fuentes de la Comisión de Derechos Sociales del Congreso, que es donde se alojará la tramitación parlamentaria, apuntan que hace unos días conocieron esa pretensión. "Quieren ir a todo gas", afirma una. "Antes del 30 de junio, cuando acabe el periodo de sesiones, desean aprobarla", señala otra.

Los cálculos consisten, según las fuentes consultadas, en impulsar las negociaciones sobre aspectos concretos del proyecto a primeros de mayo. Entretanto, se celebrarán en sesión plenaria el debate y la votación de las enmiendas a la totalidad. El 11 de mayo, jueves, se vislumbra como fecha más que probable. Para ese día las posiciones deben estar mucho más claras.

La ley de familias será la primera gran iniciativa que mueva el Ejecutivo tras las elecciones de mayo, puntualiza una de las fuentes. "Es muy importante para Unidas Podemos", ilustra un diputado encuadrado en uno de los grupos parlamentarios de izquierdas. "No queremos ir a lo loco con el contenido, hay que estudiarlo bien, pero eso no implica pausa. La idea es ir deprisa", aporta otra fuente.

Tres permisos: más conciliación

El Gobierno ha llegado con algunos rasguños a la precampaña del 28 de mayo. La reforma de la ley del “sólo sí es sí” que el PSOE está salvando gracias al apoyo del PP ha generado la crisis más sonora desde que se formó la coalición, en enero de 2019. Y ha habido roces, unos cuantos. 

Nada como el choque por la ley de garantía de libertad sexual, patrocinada por Irene Montero. La ministra de Igualdad asumió la derrota político-parlamentaria el jueves pasado, cuando el Congreso avaló la propuesta de reforma del PSOE. Fue un mal trago. El Senado dará el “ok” final este miércoles próximo, siempre y cuando no introduzca cambios en la redacción. Otra mal trago.

Para superarlos cuanto antes, Unidas Podemos se va a volcar en la ley de familias. Sus medidas principales espolean a los "morados". El proyecto reconoce a las familias LGTBI, a las familias con miembros con discapacidad, a las familias múltiples, a las adoptivas, a las reconstituidas o las acogedoras. Además, permite a las parejas de hecho acceder a 15 días de permiso por registro.

En la conciliación se encuentran las novedades más contundentes. Crea la ley tres permisos: por cuidado de 5 días al año, en casos de accidente o enfermedad graves, hospitalización o intervención quirúrgica sin hospitalización que necesite reposo, tanto de un familiar hasta segundo grado como de un conviviente; parental de 8 semanas; y por causa de fuerza mayor, hasta 4 días al año, por motivos familiares urgentes e imprevisibles. Asimismo, el Gobierno movilizará una renta de 100 euros al mes para las familias con hijos/as hasta los 3 años.

Quedan apenas unos meses para las elecciones generales y es frecuente que las nuevas normas se pierdan en el alud propio de finales de legislatura. La lista de espera es larga. Pero Unidas Podemos ha decidido empuja