La oficina del expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont pagó un viaje del jefe de este organismo, Josep Lluís Alay, a Moscú el 5 de marzo de 2019.

En respuesta a una pregunta registrada por el grupo PSC-Units en el Parlament, la conselleria de Presidencia ha indicado que los gastos de este viaje se sufragaron "contra los créditos de la oficina del expresidente", aunque en un primer momento fue el departamento quien pagó los billetes de avión desde su cuenta corriente.

La conselleria que pilota la republicana Laura Vilagrà asegura que no constan más viajes a Rusia, ni tampoco gastos vinculados a una reunión celebrada el día 17 de octubre de 2019 en Barcelona.

Presidencia recuerda que la ley que regula el funcionamiento de las oficinas de los expresidentes establece que el Govern debe aportar los medios necesarios para el "sostenimiento" de esos organismos, y destaca que el Govern se limita a publicar las memorias que las oficinas presentan ante el Parlament, sin intervenir en las actividades que se reportan.

El diario The New York Times publicó el pasado mes de septiembre un reportaje que señalaba que Alay exploró el apoyo de Rusia al procés y se reunió en Moscú con funcionarios rusos, exagentes de inteligencia y el nieto de un espía de la KGB.

Alay habría recurrido a Alexander Dmitrenko, un empresario ruso radicado en Barcelona al que se relaciona con los servicios de inteligencia de Moscú, para que le facilitara contactos para intentar que Armenia apoyara el procés.