El secretario general del PSOE en Castilla y León, Luis Tudanca, ha descartado este sábado apoyar a Alfonso Fernández Mañueco como presidente del Gobierno autonómico "si antes no rompe con Vox" y ha pedido que sea el PP el que pida aplicar el "cordón sanitario" con el partido de la extrema derecha.

Ante la reunión del lunes con Mañueco, el líder de los socialistas castellanos y leoneses ha asegurado que acudirá "a escuchar", a oír cuál es la posición "del PP, porque hasta ahora no se ha escuchado", según ha reconocido ante los periodistas en Salamanca, donde ha participado en la inauguración del Congreso de Juventudes Socialistas de Castilla y León.

En este sentido, ha pedido al candidato del PP que aclare "si está dispuesto, o no, a dar entrada a Vox en las instituciones; a negociar con los derechos de las mujeres, a poner en tela de juicio el diálogo social y el papel de los sindicatos y los empresarios en la negociación de los avances sociales y económicos que necesita esta tierra; o a entregar la llave de los presupuestos y los fondos europeos a la extrema derecha".

Tudanca también ha explicado que el PSOE ya ha dejado clara cuál es su posición frente "a algunas ideas confusas" que lanza el PP "sobre su idea de la democracia", que es que "si gana el PSOE puede pactar con quien sea, incluso con la extrema derecha para que no gobierne; mientras que si gana el PP hay que regalarle todos el Gobierno".

"La democracia no es que gobierne el PP sea cual sea el resultado. Mientras, nuestra posición es que si quieren hablar de cordón sanitario, hablamos. Eso significa que el PP tiene que pedirlo, tiene que explicar el por qué ahora, para el PP, es un riesgo para la democracia la entrada de Vox en los gobiernos, y luego tiene que romper los gobiernos que tiene con Vox, en Palencia, en Aranda de Duero, El Espinar o en Murcia", ha agregado.

"Al PP no le importa"

Asimismo, Tudanca ha señalado este sábado que la crisis abierta en el Partido Popular, entre Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso, demuestra "lo poco que le importa al PP Castilla y León", ya que las elecciones autonómicas han tenido que ver "con la guerra interna del PP".

En declaraciones a los periodistas en Salamanca, donde ha inaugurado el Congreso regional de Juventudes Socialistas, Tudanca ha reconocido que no se alegra "de lo que está ocurriendo" en el PP, porque son hechos que "alejan a los ciudadanos de la política, aumentan la desafección, debilitan las instituciones y porque este país necesita que haya un partido en la oposición que sea alternativa". Además, ha señalado que "el espectáculo" o la "batalla terrible y descarnada entre Ayuso y Casado" -como ha definido Tudanca el conflicto del PP- indica que "se está descomponiendo a pasos agigantados, fruto de su radicalización, del contagio y de la competición con la extrema derecha".

"Lo que estamos viendo esta semana es la confirmación evidente de lo que veníamos denunciando, la irresponsable convocatoria electoral de Mañueco aquí no tenía más que ver que con la guerra interna del PP, solo con eso. Lo hemos visto de forma más rápida y descarnada de lo que imaginábamos, apenas dos días después de las elecciones y dado que el resultado no era el esperado por Casado, ha sido aprovechado por Ayuso para abrir las hostilidades y para desangrarse como partido", ha señalado.

En este sentido, ha afirmado que al PP "los castellanos y leoneses no les importa", ni les "ha importado las elecciones", sino que, en su opinión, "lo único que les interesó ha sido utilizar estas elecciones como arma arrojadiza de unos contra otros", por lo que ha calificado estos hechos como una "falta de respeto a esta tierra y a las gentes de esta tierra".

En este escenario, el líder de los socialistas castellanos y leoneses ha explicado que Mañueco se ha colocado una situación "muy compleja", porque "ha abierto las puertas a Vox en las instituciones y ahora está dispuesto a abrírselas en el Gobierno y que Castilla y León sea la primera comunidad con la extrema derecha formando parte de un gobierno autonómico".