El Tribunal Supremo tiene previsto fallar a mediados del próximo mes de febrero las demandas presentadas contra la designación el pasado mes de marzo de Eduardo Esteban como fiscal de sala delegado de Menores, un nombramiento que ha sido recurrido ante la Sala de lo Contencioso-Administrativo por la Asociación de Fiscales (AF), mayoritaria en la carrera, y también de modo particular por uno de los aspirantes a la plaza, el fiscal José Miguel de la Rosa. La decisión coincidirá en el tiempo con la convocatoria de varios puestos clave, entre los que se encuentran los de fiscales jefe de la Audiencia Nacional y Antidroga.

La resolución de los dos recursos podría ser conjunta, por la coincidencia de los motivos alegados, referidos a la adecuación o no de las decisiones de la fiscal general del Estado, Dolores Delgado, a los principios de mérito y capacidad que deben regir los nombramientos discrecionales, si bien esta decisión aún no ha sido adoptada según fuentes del alto tribunal consultadas por El Periódico de España La fecha para la resolución de una de las dos demandas ya se ha fijado para la segunda semana de febrero.

La AF lleva criticando la política de nombramientos de Delgado desde el inicio de su mandato, por su tendencia a designar para los puestos más relevantes a miembros de la Unión Progresista de Fiscales (UPF), a la que ella perteneció hasta ser nombrada ministra de Justicia. En el caso de la designación de Esteban, la asociación de tendencia conservadora decidió dar un paso adelante y recurrir su nombramiento ante el Supremo por considerarlo "arbitrario".

En la demanda, de la que informó en su día Europa Press, además de alegar vulneración de los principios de mérito y capacidad que justificarán que en vez de De la Rosa, perteneciente a la AF, se eligiera a Esteban, la asociación conservadora pone el acento en la "querencia" de Delgado por los miembros de la Unión Progresista de Fiscales (UPF) -- a la hora de realizar nombramientos discrecionales en los altos estratos de la FGE. Este extremo es negado desde la Fiscalía General, que defiende el equilibrio en las designaciones realizadas por su actual titular desde que accedió al cargo.

Delgado propuso a Esteban --hasta entonces fiscal del Tribunal Constitucional (TC) y exjefe de la Fiscalía de Madrid--, durante el Pleno del Consejo Fiscal celebrado el pasado 12 de marzo. Valoró como "mérito indiscutible" la "capacidad de gestión" que demostró en su puesto en Madrid, "la fiscalía territorial más numerosa y compleja de todo el territorio nacional", y mencionó también su "talante y disposición para generar sinergias positivas".

Según la AF el más adecuado hubiera sido De la Rosa, fiscal experto en menores que está adscrito a la Fiscalía del Supremo. En ese momento manifestó que no entendía que pudiendo nombrar a "uno de los máximos especialistas en menores" se hubiera optado por otro fiscal ajeno a esta materia.

Próximo nombramientos

La casualidad y los plazos de resolución de los asuntos en la Sala de lo Contencioso del Supremo han hecho coincidir la resolución del asunto de Esteban, que de estimarse supondrá un varapalo para Delgado, con la convocatoria de varios nombramientos en la cúpula fiscal cuyos titulares agotan el próximo mes sus cinco años de mandato.

En febrero de 2017 se convocaron las plazas de fiscal de Sala contra los delitos relativos a la Ordenación del Territorio y Protección del Patrimonio Histórico y el Medio Ambiente e Incendios Forestales y también las jefaturas en las fiscalías especiales de Seguridad Vial, Extranjería, Criminalidad Informática, Cooperación Penal Internacional, Audiencia Nacional y Antidroga.

Fuentes de la Fiscalía señalan a este diario que las convocatorias para cubrir estas plazas se harán públicas antes de que finalice el mes. Los aspirantes dentro de la carrera tienen claro que habrá cambios, ya que Delgado ha manifestado en varias ocasiones que no renovará a los jefes que lleven dos mandatos. 

 Los nombramientos discrecionales en la Fiscalía se discuten en el Consejo Fiscal, en el que hay miembros de la carrera de distintas sensibilidades, si bien es la fiscal general la que propone al Consejo de Ministros los nombres que finalmente considera adecuados para ocupar las distintas jefaturas.

Anticorrupción, en julio

Para Anticorrupción se designó en febrero de 2017 a Manuel Moix, una elección muy polémica del fallecido fiscal general José Manuel Maza que apenas duró, pues el entonces fiscal Anticorrupción dimitió del cargo a los 87 días de su llegada tras conocerse que desde 2012 era dueño del 25 por ciento una empresa 'offshore' en Panamá junto con sus hermanos. Le sucedió el actual jefe Anticorrupción, Alejandro Luzón, que cumple cinco años de mandato a principios del próximo mes de julio.

Entre los candidatos de entonces estaban la teniente fiscal Belén Suárez y María Teresa Gálvez, quien dentro de este departamento es una de las fiscales adscrita al 'caso Púnica', pero ninguna fue elegida para esta plaza, que nunca ha sido para una mujer.

En cuanto en la Audiencia Nacional hace cinco años se presentaron, entre otros, el actual fiscal del Supremo Javier Zaragoza, que aspiraba a un tercer mandato; el número dos en la fiscalía del Tribunal de Cuentas, Luis Rueda o el entonces fiscal superior de Madrid Jesús Caballero, quien hace años también ejerció en la Audiencia. Finalmente el puesto fue para el entonces teniente fiscal y portavoz de la conservadora Asociación de Fiscales Jesús Alonso.

Ya en octubre de 2020 Delgado rechazó promocionar a los fiscales del procés para la plaza de fiscal de Sala jefe de sección Penal en el Tribunal Supremo al que se habían presentado Javier Zaragoza, Consuelo Madrigal y Jaime Moreno, tres de los fiscales que intervinieron en el juicio del del 1-O. En dicha ocasión optó un cargo de su confianza, el fiscal José Javier Huete que hasta entonces ejercía Unidad Especializada de Menores de la Fiscalía General del Estado.

También hubo nombramientos en enero de este año, entre los que destacó el de Juan Ignacio Campos, recientemente fallecido, que era el fiscal que dirigía las investigaciones contra el Rey emérito, como teniente fiscal del Tribunal Supremo, un puesto que supone ser el número dos en la carrera tras la fiscal general.. Además, el pasado 4 de mayo Dolores Delgado ascendió entre otros a Antonio Romeral, el fiscal que acusa en la causa por la 'caja b' del PP al puesto de teniente fiscal Anticorrupción; así como a la que fuera portavoz de la Asociación Progresista de Fiscales (UPF) Teresa Peramato, que obtuvo la Fiscalía de sala contra la Violencia Sobre la Mujer.

El último nombramiento relevante fue el del pasado 11 de enero, cuando la fiscal general anunció la elección de la hasta ahora fiscal de Sala de lo Penal del Tribunal Supremo María Ángeles Sánchez Conde, también de la UPF como nueva teniente fiscal del alto tribunal en sustitución de Campos.