Felipe VI y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tienen previsto inaugurar el Salón del Automóvil de Barcelona el próximo día 30, en víspera del cuarto aniversario del referéndum ilegal en Cataluña, han informado a EFE fuentes del Gobierno.

El rey y Sánchez transmitirán el apoyo institucional al sector de la automoción, uno de los más afectados por la pandemia, ante la fase de recuperación económica con la llegada de los fondos europeos.

Felipe VI ya abrió el salón Automobile Barcelona en mayo de 2019, cuando estuvo acompañado por el entonces presidente de la Generalitat, Quim Torra.

En aquella ocasión, también tenía previsto ir el jefe del Ejecutivo pero canceló finalmente su asistencia ante el mal estado de salud del exlíder socialista Alfredo Pérez Rubalcaba.

La presencia del monarca y de Sánchez en el recinto de Montjuic tendrá lugar un día antes del 1-O y una vez puesta en marcha la mesa de diálogo entre el Gobierno y la Generalitat.

Con motivo del 1 de octubre, plataformas independentistas como la Asamblea Nacional Catalana (ANC) tienen planeado organizar movilizaciones para conmemorar el aniversario de la consulta ilegal.

El salón Automobile Barcelona, organizado por Fira de Barcelona, tiene en esta edición como lema "Vuelve la ilusión", al ser uno de los primeros certámenes del sector que se celebra de manera presencial desde que estalló la pandemia.

Más de 20 marcas presentarán sus novedades en un evento centrado en la electrificación y la descarbonización.

La última ocasión en la que Felipe VI visitó Barcelona fue el pasado 1 de julio, cuando estuvo con la reina Letizia, la princesa Leonor y la infanta Sofía en la ceremonia de los premios de la Fundación Princesa de Girona.

Pocas semanas antes protagonizó otros dos desplazamientos a la capital catalana, una para participar en una reunión del Cercle d'Economía y, la segunda, también con Sánchez, para presidir la apertura del Mobile World Congress.

En ambas citas coincidió con el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, quien plantó al rey en el saludo protocolario como gesto de desaprobación de la monarquía.

Además de participar en la inauguración de la feria automovilística, se espera que el monarca vaya a Barcelona en otoño a la entrega de los despachos a los nuevos jueces.

El pasado año no asistió a este evento, que tuvo lugar pocos días antes del 1-O y de la sentencia del Tribunal Supremo de inhabilitación de Quim Torra.

El Gobierno justificó la ausencia de don Felipe en que era aconsejable "velar por la convivencia" y no generar más crispación.