Los asesinatos de Samuel Luiz, Younes Bilal y de decenas de mujeres en el último mes han puesto en relieve que la homofobia, el racismo y la misoginia no son algo anecdótico en España. Y es que, antes de morir, muchas de esas víctimas escucharon insultos como “maricón”, “moro” o “puta”, delitos de odio que durante los primeros seis meses de este año se han disparado un 9,3% hasta los 610 casos y que han encontrado en internet un amplificador de su mensaje.

Así lo explicó este miércoles el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, en la presentación del Informe de la evolución de delitos de odio en España 2020. El estudio arroja datos preocupantes, y es que el año pasado se registraron 1.401 conductas que incitan al odio, especialmente en los ámbitos de racismo y por ideología (57,9%), seguido del ámbito de orientación e identidad sexual (19,8%). La mayoría de esas son perpetradas por hombres, un 73% en la primera categoría, un 88% en la segunda y un 91% en la tercera.

Esas cifras son inferiores a los 1.706 casos registrados en 2019, lo que podría deberse a que el año pasado estuvo marcado por el confinamiento. Esos delitos fueron, en su gran mayoría, amenazas (23,3%), lesiones físicas (18,8%) y daños (8,1%).

Acoso y violencia en las redes

Internet y las redes sociales siguen siendo poderosos canales para los delitos de odio, consecuencia directa de una retórica política cada vez más reaccionaria. Aunque los incidentes detectados en ese espacio virtual descendieron ligeramente en 2020 hasta los 189 casos, hubo aumentos notorios en la discriminación antigitana, por sexo/género, por orientación sexual e identidad de género, por discapacidad y por racismo.

Sin embargo, el estudio remarca que no puede comprender todo ese fenómeno, pues hasta nueve de cada diez víctimas (un 89,24%) no denuncian su situación. Otro estudio de la Unión Europea (UE) alertó de ese factor a principios de julio y señaló que se debía a la desconfianza de la víctimas con la justicia e incluso al temor al a reacción de los cuerpos policiales.