Tras tres días de negociaciones en la Unión Europea para definir una respuesta económica a la crisis del coronavirus, el líder del PP, Pablo Casado, ha achacado a la poca credibilidad de España las dificultades que está encontrando el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para sacar adelante un acuerdo que sea beneficioso para los intereses del país. Según ha apuntado, primero las políticas del PSOE en el Gobierno y después las de socialistas y morados han lastrado la imagen de España en Europa.

"Tenemos que lamentar que hayamos llegado sin los deberes hechos a esta negociación. En Europa la credibilidad, la solvencia y la confianza pesan mucho", ha sentenciado el dirigente de los conservadores antes de apuntar a que "el incumplimiento del déficit", el "despilfarro en decretos electorales" o "la tardanza en seguir aplicando reformas" no han ayudado a consolidar estos valores. A este respecto, ha insistido en que España ha llegado a esta situación debido a una "recesión que han producido las malas políticas de los últimos años" que se han visto agravadas por la pandemia.

En la apertura de una conferencia de los cursos de Verano de El Escorial, Casado ha pedido al Ejecutivo que "se deje ayudar en las próximas ocasiones" por el PP. En el mismo sentido, ha afeado al vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, que haya torpedeado las negociaciones "acusando a los países frugales de los ataques contra España".

Pese a todo, Casado se ha mostrado esperanzado ante la posibilidad de que este lunes se pueda alcanzar un acuerdo en el seno de la Unión Europea y el parlamento europeo apruebe el plan de reconstrucción ante la pandemia del covid-19.

LA RECETA

No obstante, el líder de los populares ha querido mostrarse "positivo y propositivo", para lo que ha señalado el camino que debería seguir Sánchez si quiere lograr una mayor "solvencia y estabilidad". Así, ha abogado por una reforma fiscal que permita ser más competitivo "en vez de amenazar con subidas de impuestos, "ser flexibles" en el marco laboral, aliviar las cargas burocráticas, invertir en formación y apostar por ser competitivos en todos los sectores económicos.