Font Vella ha tenido que salir al paso en las últimas horas para reaccionar contra un boicot impulsado a través de las redes sociales por los tapones amarillos de unas de sus botellas, al considerar que es un gesto de apoyo a los políticos independentistas presos.

Según ha aclarado la empresa, fundada en 1943 para embotellar y distribuir el agua del manantial de Sant Hilari Sacalm, las botellas con tapón amarillo pertenecen a una "colección especial con tapones y etiquetas multicolores lanzada en julio pasado". En esta colección, también hay botellas con tapones de color azul, rojo o verde.

La embotelladora, que en 1974 entró a formar parte de Danone, detectó los primeros mensajes llamando al boicot en la noche del lunes y decidió reaccionar de inmediato la mañana del martes para rechazar cualquier interpretación política. Se trata de una colección con la que se buscaba dar un 'look' diferente a las botellas y no hay nada más allá de lo creativo y artístico. "Nuestra prioridad en todo momento ha sido aclara la confusión y responder de la forma más personalizada posible a quienes estaban haciendo que este bulo creciera", ha explicado a EL PERIÓDICO Cristina Mendizábal, mánager de comunicación externa de Danone.

"Realizar un boicot por tener tapones de diferentes colores para que cada uno elija el que más le guste quizá no es la opción más plural. Además de ese tampón amarillo, tenemos de muchos otros colores. Son solo colores para que nuestras botellas sean más bonitas, nada más. Saludos", ha escrito Font Vella en su cuenta de Twitter en una de las numerosas respuestas que ha dirigido a usuarios a favor del castigo.

COSAS AMARILLAS

La iniciativa contra los tapones amarillos ha tenido también una reacción irónica por parte de muchos usuarios que se han mofado de la relación establecida entre el color y la reivindicación independentista y han bromeado con boicotear otros productos que utilizan este color en sus envases, como el ColaCao, la Fanta de limón, los plátanos, la tónica Schweppes o, incluso, la paella.